Las compraventas mensuales están por encima de las 30.000 operaciones
"Se vende". Este es el cartel que luce en las fachadas de algunos edificios cuando al propietario de un inmueble le toca decir adiós al que hasta el momento había sido su hogar. Los motivos para querer vender una vivienda pueden ser variados, sin embargo, antes de tomar esta decisión deben tenerse en cuenta numerosos factores que pueden influir en el precio y el tiempo del proceso venta como el contexto del mercado inmobiliario o incluso la época del año.
Enero es el mejor mes para vender un piso, puesto que es la época en la que más compraventas se han cerrado a lo largo de los años, tal y como explican desde el portal inmobiliario Fotocasa. No obstante, julio y septiembre también se posicionan como meses con un alto nivel de actividad. Además señalan que para poder vender un piso en verano o a inicios de septiembre, ponerlo a la venta durante las vacaciones de la temporada estival puede ser una "idea eficaz".
5 motivos para vender una casa en verano
El verano es la época de año que coincide con las vacaciones de la mayoría de personas en nuestro país y, por consiguiente, cuando más tiempo libre se tiene para dedicarle a la venta de una vivienda. Por tanto, desde este portal inmobiliario comparten los motivos para vender un inmueble en los meses de julio y agosto:
1. Más tiempo para gestionar la compraventa: en estos meses hay más tiempo para gestionar los trámites necesarios para poder vender un piso.
2. La demanda continúa siendo suficientemente alta: el portal inmobiliario señala que las compraventas mensuales están por encima de las 30.000 operaciones, lo que muestra que la demanda de vivienda en nuestro país se encuentra "activa y estable". Además, los meses de verano se han convertido en épocas de mayor actividad, puesto que los compradores también usan su tiempo libre para buscar y visitar inmuebles.
3. Menos tiempos de espera para gestionar los trámites y papeleo: las oficinas administrativas y notarías no cierran en verano, por lo que durante esta época del año, los tiempos de espera son más cortos y hay menos colas.
4. Buen momento para captar compradores extranjeros: los compradores extranjeros aprovechan los meses de verano, cuando se encuentran en el país, para buscar una residencia en España. "Si un inmueble se encuentra en una gran ciudad, cerca de la playa o en una isla, vender en época del año puede ser una genial idea", asevera Fotocasa.
5. Menos competencia de viviendas en venta en la zona: el verano se ha relacionado con un periodo de baja actividad inmobiliaria, por ello, la oferta disminuye, existe una menor competencia y más oportunidades de destacar.
