Lejos de resolverse, el conflicto que sufre la ciudad de La Coruña por la huelga de los servicios de recogida de basura se intensifica. La quema de contenedores , que se sucede prácticamente a diario desde el pasado mes de junio, afectó durante la madrugada del jueves al viernes a la fachada de un edificio en la calle Ramón del Cueto, provocando que tres vecinos tuviesen que recibir atención sanitaria por inhalación de humo . Los bomberos de La Coruña, junto a agentes de la Policía Local y Nacional y miembros del 061, se personaron en el lugar de los hechos, donde atendieron a los afectados a pie de calle después de que escapasen de sus viviendas, por las que el humo se filtró a través de las ventana entorno a las 5,00 horas de este viernes. Además, otros tres contenedores fueron quemados intencionalmente en la Rúa do Faro y en la calle Revolución Francesa. Una noche más para los vecinos de la ciudad, que se debaten entre el miedo y la indignación ante un problema que viene de largo y que desde hace semanas se convirtió en costumbre. Los coruñeses también recuerdan los antecedentes: u na huelga anterior, en febrero de 2022 , que se cerró con un acuerdo entre los trabajadores de Prezero (empresa concesionaria) y el Ayuntamiento. Un pacto de lo más efímero vistos los acontecimientos de estos semanas. Dos años después se reabre el mismo conflicto, que cada día que pasa se recrudece: que tres personas requirieran atención por la inhalación de humo supone un paso más en la escalada del conflicto , que recibió respuesta por parte del Ayuntamiento. Su alcaldesa, Inés Rey, declaró ayer la emergencia sanitaria «total» en la ciudad, extendiendo el alcance de la misma a todo el área metropolitana coruñesa, once días después de que anunciase la medida de manera acotada a los puntos más afectados de la misma. «Mi posición está sumamente clara, no ceder al chantaje ni a la extorsión», afirmó Rey, que volvió a condenar los «actos vandálicos y de violencia extrema» tras ser preguntada por las tres personas afectadas por haber inhalado humo en sus propios domicilios. «Son actos delictivos que no están justificados», añadió la alcaldesa, que aprovechó la ocasión para exigir a la empresa concesionaria del servicio de basura, Prezero , cuyo sindicato mayoritario -Sindicato de Trabajadores de la Limpieza (STL)- es el impulsor de la huelga, a que «siga tomando medidas contundentes y siga sancionando» , en alusión tanto a los despidos como a las multas que ya llevaron a cabo. «No se puede permitir la presencia de un sindicato que pretenda controlar la contratación de un servicio público», añadió Rey en declaraciones recogidas por Ep. Asimismo, la regidora señaló que la empresa Valoriza, contratada desde el miércoles 24 de julio para cubrir este servicio tras el decreto de emergencia sanitaria parcial establecido esa misma semana, ampliarán su jornada a las tardes de lunes a domingo. Mientras, la basura continúa acumulándose , especialmente en las zonas periféricas de la ciudad compuestas en su mayoría por barrios residenciales. Por otra parte, el portavoz del comité de empresa del sindicato STL , Alfonso Seijo, descartó una vez más la vinculación de su organización con la quema de contenedores y justificó la falta de servicio de recogida de basura, «no por la huelga, sino porque no tienen personal ». Aseveró que la falta de servicios mínimos correspondientes a la huelga se debe al «despido de cinco personas» y a que «28 estén cumpliendo sanción», además de que no se esté contratando a más personal para cubrir las vacantes. «La empresa se está ahorrando mucho dinero y la alcaldesa, en vez de obligarla a cumplir los servicios mínimos, no hace más que pedir que rueden cabezas », criticó Seijo, que defendió la intención del sindicato de llegar a un acuerdo con el Consistorio, aunque afeó «la actitud de la alcaldesa». «Así no vamos a llegar a ningún lado», concluyó el portavoz. El pulso entre el Ayuntamiento y el sindicato no se limita a las negociaciones entre ambas partes, ya que el Consistorio presentó el miércoles una denuncia ante la Fiscalía Provincial por «la situación de insalubridad y la huelga de basura» por si fuese delictiva. El escrito también solicita al órgano una investigación respecto a «los actos vandálicos derivados de este conflicto ». Mientras, el sindicato STL mantiene los paros desde el 24 de junio alegando como motivantes los «despidos injustificados», la «externalización del servicio» y el «incumplimiento» del convenio. El Ayuntamiento insistió entonces en que, «pese a no tener ningún seguimiento por parte de la plantilla, esta tampoco realiza el trabajo con normalidad», tal y como mostraban las calles, con basura acumulada desde hace días o incluso semanas. Una crítica en la que volvió a incidir Rey: «Cero trabajadores secundaron la huelga nuevamente» . Los datos compartidos por el Consistorio le dan la razón, ya que en barrios como Matogrande-Eirís y Mesoiro-Feáns-Valaire el porcentaje de recogida es del 0%.