Ciclista belga Evenepoel ya tiene la doble corona en París
Campeón olímpico hace una semana en la contrarreloj, el belga Remco Evenepoel selló la gesta de hacerse con las dos medallas de oro en juego en ciclismo en ruta al imponerse este sábado en la prueba en línea por unas calles de París abarrotadas de aficionados.
El talentoso y polifacético corredor de 24 años, que es vigente campeón del mundo de lucha contra el crono y fue tercero en la general del último Tour de Francia, superó a los franceses Valentin Madouas, plata, y Christophe Laporte, bronce, para suceder al ecuatoriano Richard Carapaz, que no se clasificó para París.
Evenepoel es el primer corredor masculino en la historia que se cuelga la medalla de oro en la prueba en línea y en la contrarreloj en unos mismos Juegos Olímpicos.
No fue en esta ocasión en los Campos Elíseos ni con un maillot amarillo a la espalda como es habitual en París cuando la ciudad acoge el final del Tour, pero Evenepoel volvió a coronarse en París.
La capital francesa se había quedado este año sin poder albergar el final de la 'Grande Boucle', desplazado a Niza por los preparativos de la cita olímpica, y los aficionados estaban con ganas de ver en directo a los mejores corredores del mundo.
Así lo demostraron a largo de los 273 kilómetros con 13 repechos que presentaba el trazado, y que dejó ofreció imágenes icónicas como la Basílica de Sagrado Corazón, la subida por las calles adoquinadas del barrio de Montmartre, el paso delante del Moulin Rouge con sus tradicionales bailarinas alentando a los corredores sobre el asfalto, o la llegada bajo la Torre Eiffel.
Evenepoel, que figuraba en la terna de favoritos antes de la salida junto a su compatriota Wout Van Aert y al campeón del mundo neerlandés Mathieu van der Poel (37º y 12º respectivamente), pegó el hachazo a la carrera ya en la parte final del recorrido, por las calles de París, imprimiendo un ritmo infernal en la subida adoquinada de Montmartre ante el que poco pudo hacer Madouas.
El belga tuvo incluso que cambiar de bicicleta delante del Museo del Louvre, a poco más de 3 kilómetros para meta, por un problema mecánico, pero aun así llegó a meta en solitario con más de un minuto sobre el segundo.
Nada más cruzar la meta extendió los brazos, se bajó de su bici, la colocó delante y posó majestuosamente delante de las cámaras como uno de los reyes del ciclismo mundial, con permiso del campeón del Giro y Tour Tadej Pogacar, que no acudió a los Juegos.
"¡Dos medallas de oro es increíble! Ser el primero en la historia en lograrlo es increíble", declaró a la televisión francesa.
La carrera, con un total de 2.800 metros de desnivel pero repartidos en tachuelas de poca entidad, comenzó con una pronta escapada que llegó a contar con 11 minutos de ventaja, pero que nunca tuvo visos de cristalizar, formada por corredores desconocidos en el pelotón.
El irlandés Ben Healy y el kazajo Alexey Lutsenko probaron el primer ataque de entidad al dar alcance a esos fugados, pero ni Evenepoel ni la armada belga estaban dispuestos a permitir la sorpresa, y finalmente la foto para la historia bajo la Torre Eiffel fue para corredor flamenco, que amplió un palmarés ya de ensueño con una Vuelta a España, dos campeonatos del mundo (en línea y contrarreloj) o dos Lieja-Bastoña-Lieja.
El ciclismo español y latinoamericano apenas tuvo protagonismo este sábado, con el español Álex Aramburu 18º y el colombiano Santiago Buitrago 19º como mejores clasificados.