A Colón
Transito por el Ferrocarril Central camino al municipio de Colón. Lo consigo, como fruto de la imaginación: podía haber seleccionado la Carretera Central, otro sendero entrañable para llegar hasta mi tierra. Pero el ferrocarril es la conexión del recuerdo con la industria azucarera, primer rubro de trascendencia para la fértil llanura de Colón, que el 8 de agosto de 1836 se fundara como Nueva Bermeja.
Ninguna emoción se vive como la de llegar a tu pueblo. La tierra de figuras como Mario Muñoz Monroy, médico del Moncada, quien resulta el ícono que simboliza la participación de otros colombinos en la gesta del 26 de Julio. Entre ellos justamente otro Mario, de apellidos Martínez Ararás, quien estuvo en el asalto al cuartel de Bayamo.
Mi abuelo materno conoció a Mario Martínez Ararás, nombre que lleva en la actualidad el principal estadio de béisbol del territorio. En los relatos de mi niñez, recuerdo cómo se emocionaba mi viejo cuando hablaba de aquel eterno joven, fraternal, carismático, con quien tuvo la ocasión de compartir. Luego, supo de lo terrible. Y cuando la historia grande se cuenta desde lo local, desde la admiración, desde los afectos, uno se siente comprometido con el espacio pequeño y con el grande, por siempre.
Durante un juego de la Serie Nacional de Béisbol en Colón, mi abuelo y yo no alcanzamos asientos en el estadio municipal. Nos correspondió una dosis de sol detrás de la cerca, por el jardín derecho. Y desde allí, mi abuelo miraba a la parte superior de la pizarra. Le pregunté si buscaba algo en específico y me dijo: —Mario, caramba. Como hubiera bromeado en un espacio así...
En este Día del Colombino Ausente, estoy lejos para el cierre de la Semana de la Cultura. No pude vivir los festejos por el medio siglo de Radio Llanura de Colón, nombre propuesto por Roberto Muñoz, hermano del médico que siguió con fe los pasos de Fidel. Pero mi homenaje a Mario Martínez Ararás, a mi abuelo y a tantos colombinos, conocidos o anónimos, no podía faltar hoy.
Regalo de jueves
Patria es Humanidad, es aquella porción de la humanidad que vemos más de cerca, y en que nos tocó nacer. José Martí