Los rumores de divorcio entre Jennifer Lopez y Ben Affleck siguen tomando fuerza y pese a que la artista fue vista visitando a su todavía marido en su 52 cumpleaños no parece que las cosas hayan avanzado. Lo que sí ha experimentado varios movimientos en las últimas semanas es la cartera de bienes inmuebles de la mediática pareja. Primero, ambos pusieron a la venta su mansión en Los Ángeles por 60,5 millones de euros y después fue el actor quien decidió comprarse una finca ecuestre en Sullivan Canyon por unos 18,7 millones de euros. Ahora, ha sido el turno de la ex de Marc Anthony, quien ha conseguido vender, por fin, su vivienda de Nueva York por 23 millones de dólares (unos 20,7 millones de euros al cambio actual). La residencia en cuestión, que fue construida en 1924, se encuentra en el edificio de estilo georgiano de seis plantas bautizado Whitman , por el cual han pasado diferentes propietarios de renombre como Chelsea Clinton y Jeff Gordon , leyenda de los autos de carreras. El complejo boutique dispone de portero a tiempo completo, trasteros, gimnasio y seguridad. Fue en 2014 cuando la artista compró esta propiedad por 20,1 millones de dólares y tres años después lo pondría a la venta por 27 millones de dólares. Al no encontrar comprador ha estado saliendo y entrando del mercado durante todos estos años. Este ático dúplex con vistas al Madison Square Park ubicado en 21 East 26th Street , en Manhattan, ofrece un total de 608 metros de espacio habitable entre los que se incluyen cuatro dormitorios, seis cuartos de baño completos y un aseo , más 280 metros cuadrados de espacio al aire libre repartidos en las cuatro terrazas que incluyen una cancha de croquet, una terraza ajardinada y un putting green. Entre los diferentes espacios están un rellano con ascensor con llave, sala de estar con techos altos, suelos de tablones anchos de madera de roble y grandes ventanales que inundan de luz natural el interior y permiten disfrutar de las maravillosas vistas, salón, sala multimedia con baño completo y cocina gourmet con encimeras de mármol, gabinetes personalizados lacados en blanco, una gran isla central con estantes abiertos, electrodomésticos de acero inoxidable de Miele y un refrigerador de vinos con doble temperatura controlada , estancia que se abre a un comedor formal con una mesa con capacidad para diez comensales. La suite principal dispone de dos baños separados, un gran vestidor con armarios de suelo a techo y dos terrazas privadas. Cabe destacar que la vivienda dispone de sistema de hogar inteligente Crestron. Ahora habrá que esperar para ver si la artista compra otra vivienda o permanece en alguna de sus otras propiedades, entre las que se incluyen una casa en los Hamptons de ocho habitaciones y un de tres dormitorios en Encino, California, sobre las montañas de Beverly Hills.
