La teniente alcaldesa de Cangas que superó la tasa de alcoholemia pide su baja del PSdeG

«Como mujer, socialista, feminista y demócrata lo asumo y me propongo convertirlo en una lección de vida. Soy cargo público, pero también soy un ser humano y cometo errores . Lo importante es aprender de ellos y asumir todo el peso de la responsabilidad». Con esas palabras, la teniente alcaldesa de Cangas, Iria Malvido, se manifestó el miércoles después de afirmar este martes que no iba a dimitir tras ser sorprendida en un control de la Policía Local la madrugada anterior, en la que superó el límite penal cuando conducía su vehículo tras su paso por la Fiestas del Cristo de la localidad pontevedresa. Por su parte, el BNG comunicó este miércoles su e xpulsión del gobierno municipal , donde lidera el tripartito del que también forma parte Esquerda Unida junto al PSdeG. Así lo decidieron tras reunir al Consello Local a la espera de que los socialistas « clarifiquen la situación ». «Soy consciente de la magnitud de mi error y renuncio de antemano, dada mi condición de cargo público, a cualquier circunstancia atenuante para justificar mi conducta», expresó Malvido, tras reconocer que superó «holgadamente» la tasa de alcoholemia permitida al volante. Por ello, pidió «perdón» a los vecinos de Cangas y a toda la ciudadanía. Además, se refirió de manera especial a las personas víctimas de accidentes de tráfico, porque en estas «horas dolorosas», explicó, piensa en quienes han sufrido pérdidas personales o lesiones «a causa del alcohol en la carretera». Tras subrayar que el disfrute de las fiestas de la localidad debe ser «compatible con el respeto a las normas», insistió en que la seguridad vial es un ámbito en el que «no caben excusas de ningún tipo». «Lo importante es que esto no tendría que haber sucedido nunca», aseveró, lamentado el «dolor» que pudo causar a quienes confían en el proyecto político del PSOE . Asimismo, Malvido confirmó que informó de lo ocurrido a la Ejecutiva provincial socialista y que está «a la espera» de lo que decida el Comité Federal de Ética del partido . «Acataré con la misma disciplina de siempre la decisión que tome Ferraz», apuntó la teniente alcaldesa, para remarcar a continuación que su «conducta privada» no debe perjudicar al PSOE, por el que «siempre» seguirá trabajando.