¿Qué santo se celebra hoy, 10 de septiembre? Esto es lo que debes saber del santoral de la Iglesia Católica
El santoral, también conocido como calendario litúrgico, es un libro religioso que contiene la lista de los santos reconocidos por la Iglesia Católica y que se celebra cada día del año. Más allá de una simple lista de nombres, el santoral representa un viaje fascinante a través de la fe, la historia y la cultura cristiana.
¿Qué santos se celebran hoy martes 10 de septiembre?
- San Pedro Claver: También conocido como San Pedro Claver, fue un sacerdote jesuita del siglo XVII conocido por su trabajo con los esclavos africanos en Colombia. Dedicó su vida a la asistencia y evangelización de los esclavos que llegaban al puerto de Cartagena.
- San Juan Gabriel Perboyre: Un sacerdote de la Congregación de la Misión (Vicentinos) que fue martirizado en China en 1840. Es conocido por su trabajo misionero y su valentía en tiempos de persecución.
- Santa Pulcheria: Santa Pulcheria fue una emperatriz bizantina del siglo V, conocida por su piedad y su influencia en la iglesia, así como por su rol en el Concilio de Éfeso.
San Nicolás de Tolentino: Vida y Pontificado
San Nicolás de Tolentino nació en 1245 en Sant'Angelo in Pontano, en la región de Marche, Italia. Desde joven, sintió una profunda vocación religiosa y se unió a la Orden de San Agustín, ingresando en el convento de Tolentino. Allí, se destacó por su ferviente vida de oración y su dedicación al servicio de los demás. Nicolás era conocido por su humildad, piedad y dedicación a las prácticas espirituales, lo que le ganó gran respeto entre sus contemporáneos.
Durante su vida, San Nicolás se dedicó intensamente a la asistencia espiritual y al cuidado de los enfermos. Era especialmente conocido por sus prácticas devocionales por las almas del purgatorio, a quienes ayudaba a través de sus oraciones y sufragios. Su vida de dedicación y servicio hizo de él una figura venerada en su comunidad y más allá.
Canonización y Legado
San Nicolás de Tolentino fue canonizado el 3 de marzo de 1446 por el Papa Eugenio IV. Su canonización se basó en el reconocimiento de su vida ejemplar de virtudes y sus numerosos milagros atribuidos a su intercesión. La fama de sus milagros y la devoción popular jugaron un papel crucial en su reconocimiento como santo.
El legado de San Nicolás se manifiesta en su dedicación a las almas del purgatorio, que le valió el título de "Apóstol de las Ánimas". Su vida y obra inspiraron a muchos a seguir su ejemplo de piedad y caridad. Es conocido también por haber promovido la devoción a la Virgen María y haber establecido prácticas que perduraron en la Orden Agustiniana.
Exilio y Muerte
San Nicolás de Tolentino murió el 10 de septiembre de 1305 en el convento de Tolentino. A pesar de su vida dedicada al servicio y a la oración, enfrentó desafíos durante su vida, incluyendo conflictos dentro de la Orden y con autoridades locales. Sin embargo, su vida estuvo marcada por un fuerte sentido de propósito y un compromiso inquebrantable con su vocación.
Su muerte fue seguida de un proceso de veneración que llevó a su canonización y al establecimiento de su festividad en el calendario litúrgico. San Nicolás de Tolentino sigue siendo una figura venerada en la Iglesia Católica, especialmente en la Orden de San Agustín, y es recordado por su devoción y su dedicación a la intercesión por las almas del purgatorio.