Reto de transformación y compromiso social
NUEVA GERONA, Isla de la Juventud. — Reynaldo Velázquez Zaldívar, viceministro de Educación Superior, se reunió con estudiantes de primer año de las carreras de Derecho, Contabilidad e Ingeniería en Informática en la Universidad Jesús Montané Oropesa en Isla de la Juventud, una oportunidad para escuchar las expectativas de los futuros profesionales.
El encuentro, realizado en el teatro de la institución, sirvió también para reflexionar con los jóvenes y profesores presentes, sobre el rol que desempeña la educación en la formación integral de los estudiantes.
El catedrático enfatizó la importancia de inculcar valores a través de la labor ideopolítica, un componente esencial que debe permear la enseñanza del marxismo e historia dentro del currículo.
Sin embargo, el debate circuló por una pregunta crucial: ¿estamos realmente formando profesionales comprometidos con su entorno social, o simplemente estamos preparando trabajadores para un mercado laboral?
Entre los asuntos preocupantes del encuentro, sobresalió que de las 25 carreras disponibles en esta universidad, solo cuatro hayan abierto matrícula en la modalidad regular diurna.
A juicio del viceministro y los funcionarios que lo acompañaron, esa realidad plantea un desafío significativo en términos de acceso y equidad educativa, un asunto que el territorio debe solucionar.
En ese sentido, Rafael Ernesto Licea, Presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular, quien se sumó al diálogo, informó que el horizonte estudiantil en el preuniversitario este año muestra un incremento considerable con respecto a años anteriores, dato que presupone una mejor captación para el curso regular diurno en próximas etapas.
Otra arista versó sobre como la Federación Estudiantil Universitaria se ha posicionado como un actor clave en la promoción de proyectos extensionistas que buscan transformar tanto comunidades como el propio estudiantado.
Sobre esa realidad, Velázques Zaldivar indicó que para ser eficientes en la transformación, no solo del entorno comuitario, sino también de la conducta de los estudiantes, la participación estudiantil debe ir acompañada de una estrategia y que apoye y fomente su involucramiento.
Durante la reunión con el consejo de dirección, se discutieron aspectos cruciales como el perfeccionamiento de la enseñanza de la historia y el marxismo, el éxodo de estudiantes por problemas económicos y el envejecimiento del claustro docente, realidades que se pueden ignorar.
Se destacó la existencia de un observatorio social, las iniciativas de apoyo en obras sociales de la orgaización estudiantil y la participación de la Casa de Altos Estudio pinera en las acciones de desarrollo territorial, incluyendo el programa de transición ecológica hacia un municipio sostenible.
En ese sentido, se explicó que la Universidad, no solo forma parte del grupo coordinador del programa, sino que también se incluye con tres proyectos de innovación social que abarcan a formación de capacidades y aportará, además, las bases científicas para su aplicación en Isla de la Juventud.
El llamado de Reynaldo Velázquez Zaldivar fue manteber la participación de la universidad en proyectos de desarrollo productivo y sostenible, formar profesionales competentes y ciudadanos comprometidos con su entorno, su territorio y el país.
«La educación superior debe ser un motor de cambio social, capaz de responder a las necesidades locales y contribuir al bienestar colectivo, solo así podremos forjar un futuro más justo y equitativo», dijo.