Arrestan a tres estadounidenses y dos españoles acusados de complot para "desestabilizar" Venezuela
El gobierno de Venezuela anunció el sábado la detención de tres ciudadanos estadounidenses, dos españoles y un checo por vinculaciones con un supuesto complot para atacar al presidente Nicolás Maduro y "desestabilizar" el país, trama en la que Estados Unidos negó estar involucrado.
Los arrestos se producen en medio de crecientes tensiones entre Venezuela y los gobiernos de Estados Unidos y España por las controvertidas elecciones del pasado 28 de julio en las que Maduro fue proclamado reelecto entre denuncias de fraude.
El ministro de Interior, Diosdado Cabello, dijo en una conferencia de prensa que los extranjeros arrestados están involucrados en planes "terroristas" que incluían atentar contra la vida del presidente Maduro y desestabilizar el país.
Entre los detenidos nombró a Wilbert Josep Castañeda, "militar activo" de Estados Unidos y "jefe" del plan, y a los estadounidenses Estrella David y Aaron Barren Logan.
"Nosotros inclusive sabemos que el gobierno de los Estados Unidos está vinculado con esta operación", indicó Cabello, que apuntó al centro de inteligencia estadounidense.
Washington negó tajantemente estas acusaciones.
"Cualquier afirmación sobre la participación de Estados Unidos en un complot para derrocar a Maduro es categóricamente falsa. Estados Unidos sigue apoyando una solución democrática a la crisis política en Venezuela", dijo un portavoz del Departamento de Estado estadounidense.
"Podemos confirmar la detención de un miembro de las fuerzas armadas de los Estados Unidos y estamos al tanto de informes no confirmados de otros dos ciudadanos estadounidenses", añadió.
También están detenidos un checo y los españoles José María Basua y Andrés Martínez Adasme, estos dos últimos capturados en Puerto Ayacucho (Amazonas, sur).
"Hablan de la participación activa, que son parte de un contingente de mercenarios del gobierno español, a través de su central de inteligencia, para atacar al país", dijo Cabello, que señaló también a la líder opositora María Corina Machado y otros dirigentes.
"Han contactado mercenarios franceses, han contactado mercenarios de Europa del Este y están en una operación para tratar de atacar nuestro país", añadió Cabello.
Según dijo, todos los detenidos están confesando.
El ministro también informó que se incautaron "más de 400 fusiles" que eran "para actos terroristas" promovidos por "sectores políticos".
Uno de los planes era "atacar" la embajada de Argentina, donde están refugiados seis colaboradores de Machado, para después "culpar" al gobierno, aseguró.
- "Dictadura" -
España y República Checa aún no reaccionan a los anuncios del gobierno venezolano.
La tensión entre Madrid y Caracas aumentó en los últimos días después de que González Urrutia llegara el domingo pasado a España para solicitar asilo tras un mes en la clandestinidad en su país, donde es solicitado por la justicia.
El Congreso español reclamó al gobierno de Pedro Sánchez que reconozca al opositor como presidente de Venezuela, lo que provocó que el jefe del parlamento venezolano instara al Ejecutivo a romper relaciones con España.
A la situación se sumó un comentario de la ministra de Defensa española, Margarita Robles, que tildó de "dictadura" al gobierno de Maduro.
En respuesta, Venezuela llamó a consultas a su embajadora en Madrid y citó al embajador español en Caracas para protestar.
El jefe del gobierno español, Pedro Sánchez, se reunió esta semana en La Moncloa con González Urrutia.
Sánchez no reconoce la victoria de Maduro, pero tampoco la de su rival. Ha insistido, en consonancia con la posición de la Unión Europea, en reclamar la publicación de las actas electorales.
Washington, que reconoce la victoria de la oposición, anunció por su parte esta semana sanciones contra 16 funcionarios venezolanos, entre ellos la presidenta del Tribunal Supremo de Venezuela, por el "fraude electoral".
Caracas lo recibió como una "agresión" a Venezuela y Maduro condecoró a cuatro militares objeto de las sanciones.
Las elecciones en Venezuela también degeneraron en protestas que dejaron 27 muertos, 192 heridos y más de 2.400 detenidos, un centenar de adolescentes entre ellos.
Machado ha convocado a una nueva protesta opositora para el próximo 28 de septiembre, cuando se cumplen dos meses de la elección.