La recepción en el Palacio Real de Madrid fue de las más inoportunas para el Gobierno. Después de una semana especialmente incómoda para Pedro Sánchez por el caso Koldo, esta mañana asomó durante uno de los corrillos del presidente con un grupo de periodistas la polémica reforma que reducirá las penas de prisión de una cuarentena de etarras . Y no fue precisamente por las preguntas de los representantes de los medios de comunicación que asistieron a la recepción: quien incomodó a Sánchez y le puso la cara colorada fue la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Maite Araluce , quien increpó al presidente del Gobierno y le exigió que rectifique. «Es una vergüenza» , le espetó. La presidenta de la AVT echó en cara a Sánchez que no haya respondido a la carta que le enviaron el jueves, en la que le pedían que «no cambie por unos votos manchados de sangre a las víctimas del terrorismo» , y que no les reciba. Sánchez se defendió al principio esgrimiendo que no había tenido tiempo por motivos de agenda, ya que el jueves celebró una nueva ronda de contactos con presidentes autonómicos y el viernes se reunió con el Papa Francisco en el Vaticano y luego viajó a Chipre para una cumbre de líderes del Med9. Araluce insistió en su recriminación y le pidió que rectifique . Le recordó que tiene solo un día para dar marcha atrás y garantizar así que los presos etarras cumplan íntegras sus penas, a lo que Sánchez no le replicó . El Senado afrontará el lunes el debate y votación de la ley sobre intercambio de antecedentes penales de la UE que puede beneficiar a presos de ETA , después de que el Grupo Popular hiciera valer su mayoría absoluta para posponer la votación hasta la fecha límite. Desde el PP tomaron esta decisión tras el revuelo mediático que provocó que ninguno de sus diputados y asesores se hubieran percatado de la enmienda de Sumar que convalida a los etarras la pena que cumplieron en otro país. Feijóo también ha reclamado personalmente al jefe del Ejecutivo que paralice esta norma. «Le pido expresamente que retire la ley que deja sin efecto más de 300 años de prisión a los condenados por terrorismo de ETA. Tiene cinco días, hasta el 14 de este mes. Si le queda un mínimo de conciencia, le ruego que lo aproveche y recapacite», le demandó esta semana en el Congreso de los Diputados. El error de la oposición ha provocado duras críticas de las asociaciones de víctimas, que han calificado de «vergonzosa» la «negligencia» de Grupo Popular y Vox durante el trámite parlamentario.