España incumple sus obligaciones en materia de salud un año más: la inversión en gasto público baja respecto a 2021 un 0,94%
Amnistía Internacional ha revelado, tras un análisis de los últimos datos sobre gasto sanitario en España, que el país no está priorizando adecuadamente la inversión en salud, como lo exigen sus compromisos internacionales. En 2022, el gasto público en sanidad disminuyó un 0,94% respecto a 2021, lo que supone el segundo año consecutivo de recortes en lugar de incrementos.
Especialmente preocupante es la situación de la atención primaria, cuyo nivel de inversión sigue siendo un 0,02% inferior al registrado en 2009, antes de los recortes asociados a las medidas de austeridad. Esto ha provocado que 7 de cada 10 personas esperen más de 48 horas para ser atendidas, y más del 50% de las citas se demoran una semana o más.
Teresa García del Vello, responsable de derechos económicos, sociales y culturales de Amnistía Internacional España, advierte que la falta de inversión amenaza el derecho a la salud y dificulta la preparación para futuras crisis.
A nivel regional, todas las comunidades autónomas, excepto Madrid, han reducido su gasto sanitario en 2022 respecto al año anterior. Las comunidades con mayor pérdida son Castilla-La Mancha (-6,36%), Extremadura (-3,32%), Aragón (-3,31%) y Navarra (-3,15%).
El análisis también revela que seis comunidades autónomas invierten menos en sanidad que en 2009, con Castilla-La Mancha liderando el retroceso con un 11,17% menos de inversión. Le siguen La Rioja (-7,17%), Extremadura (-6,69%), Asturias (-5,46%); Galicia (-4,73%) y Aragón (-1,51%).
España también sale perdiendo en la comparativa europea. Nuestro país se encuentra por debajo de la media europea en gasto sanitario, dedicando un 10,7% del PIB frente al 11% de la UE.
El problema es más acuciante en atención primaria, con niveles de inversión en 2022 muy similares a los de 2009. Algunas comunidades, como Aragón, Extremadura, Castilla y León y Galicia, han visto reducida su inversión en atención primaria desde 2009.
Esto se traduce en un aumento de los tiempos de espera: en 2018, el promedio de espera era de 4,77 días, pero en 2023 ha aumentado a 9,12 días. Las comunidades con mayores incrementos en los tiempos de espera incluyen Canarias, Andalucía y Madrid.
A pesar de estos problemas, Amnistía Internacional considera que hay algunos avances. Uno de los pocos indicadores que muestran buenos resultados son las ratios de personal médico en atención primaria por cada mil habitantes, que en 2022 han tenido un ligero aumento: del 0,78 con respecto al 0,77 de 2021 a nivel nacional. También la ratio de personal de enfermería aumenta ligeramente en 2022 con respecto a 2021 (0,7 frente a 0,66) a nivel nacional.
La organización al ha dirigido sus conclusiones a las autoridades estatales y autonómicas, destacando algunas iniciativas positivas recientes, como la creación de la Comisión de Atención Primaria y Comunitaria y el Grupo de Trabajo de Listas de Espera. Sin embargo, insta a incrementar el gasto sanitario público y dar prioridad a la atención primaria para garantizar el derecho a la salud en España.