'Separadas tan solo por las calles de Lienz, las estaciones de Hochstein y Zettersfeld han vivido un duro e intenso verano. El permiso para seguir abriendo sus remontes este invierno dependía de las mejoras solicitadas por el órgano regulador dependiente del transporte por cable en Austria. Irónicamente los trabajos más complicados se han salvado con éxito, mientras que la tarea que se presumía menor no ha logrado salvarse con éxito.
El telecabina Zettersfeldbahn era a todas luces el más complicado de poner a punto. Hay que tener en cuenta que para que se le diese el aprobado un invierno más, se han tenido que cimentar siete pilonas para alinearlas. También ha sido necesaria una renovación técnica del sistema. Cambiar el cable y mejoras en las cabinas además de trabajos en las dos terminal...'