Worldcoin , la empresa del CEO de OpenAI, Samt Altman, que ofrecía criptomonedas por el 'módico' precio de escanear tu iris y regalar tu información biométrica, cambia de estrategia. A partir de ahora se llamará World, a secas, y permitirá a los usuarios verificar su identidad con el pasaporte. La opción de escanear los ojos de los usuarios sigue vigente, pero relegada a un segundo plano. Según Alex Vania, cofundador y director ejecutivo de Tools for Humanity, el antiguo nombre del proyecto «ya no funciona». O quizás la marca se asociaba demasiado con una palabra: 'polémica'. En abril de este año, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) obligó a la empresa a cancelar su actividad en España de forma cautelar . Más de 400.000 personas se habían apuntado ya al experimento. En todo el mundo, Worldcoin había escaneado los iris de casi siete millones de personas. «Por dinero gratis, ni pregunto» , declaraba entre risas un usuario a este diario. En dos minutos se podían conseguir 10 worldcoins, que al cambio equivalían unos 60 euros. Este mismo usuario indicaba que, cuando pasó por el escáner, no se le informó de para qué quería la empresas sus datos biométricos, ni tampoco se aseguraron de que fuera mayor de edad. Esta práctica, que resulta atractiva pero que oculta muchos riesgos al requerir datos sensibles de usuarios, está siendo investigada en Francia y Alemania, y en Kenia han llegado a prohibirse estos escáneres oculares por no quedar claro si se vulneraba la legislación del país. El iris es un dato biométrico. Esto implica que permite identificar a una persona sin que haya lugar para el error . Exactamente igual que las huellas dactilares. De acuerdo con la normativa, solo puede ser recopilado cuando hay un consentimiento explícito e informado, cosa que en el caso de Worldcoin no hacía, al menos en nuestro país. Sin embargo, pese a la controversia generada en España, el objetivo de la empresa no ha cambiado. Fundada en 2019, World aspira a crear un sistema de identificación universal, un código que identifique a cualquier ser humano en la red y lo distinga de bots o inteligencias artificiales. Para lograrlo, la empresa apostaba hasta ahora por crear un código único según la información biométrica del iris de cada persona. Y aunque no han hecho mucho hincapié, la empresa ha mostrado una nueva versión de su escáner de iris, más rápido y que permitirá extender la presencia de la compañía a más países, como por ejemplo Latinoamérica. Para aquellos países donde esta práctica genere controversia, o directamente se paralice, World permitirá a los usuarios presentar su pasaporte si está equipado con un chip NFC para lectura automática, y que contenga por tanto información digital como una fotografía o las huellas dactilares de la persona. Lo que no queda claro es si World volverá a generar colas kilométricas en los puntos donde se establezcan, porque su criptomoneda se ha precipitado en los últimos meses y ahora apenas llega a valer dos euros. De momento, este nuevo sistema de registro, llamado 'World ID Credentials', solo está disponible en Estados Unidos, Malasia y Reino Unido. La opción de escanear el pasaporte se encuentra dentro de la aplicación de la compañía, «sin que World Foundation, TFH o terceros puedan acceder a los datos almacenados fuera del dispositivo», indican. Con la ayuda del pasaporte, la empresa ofrece la posibilidad de utilizar el World ID para demostrar datos específicos como la edad, la nacionalidad y la titularidad del pasaporte sin revelar su identidad en la plataforma online a la que se quiere acceder con esta identidad digital, y sin tener que utilizar contraseñas. Por ejemplo, permitirá verificar tu identidad antes de iniciar una videollamada en servicios como Zoom, Meet o WhatsApp, donde se plantea integrar. La intención principal de este proyecto es erradicar de internet la posibilidad de suplantar la identidad de cualquier persona con herramientas deepfake.