La elección del marco temporal para el desarrollo de mi última novela, 'El aliento de las llamas' (Suma de letras) no fue casual. Arranca el 24 de febrero de 1889 porque, ese día, 'El Correo' hizo públicas unas cartas de Gertrudis Gómez de Avellaneda fechadas en 1853 a fin de airear sus gestiones para ingresar en la Real Academia Española y ocupar así la vacante que había dejado Juan Nicasio Gallego . La publicación llevaba por título 'Las mujeres y la Academia. Cartas inéditas de la Avellaneda'. Se incluía también una carta al director firmada por F. Vior en la que afeaba la ambición de la escritora cubana partiendo de una cita de Alfonso X, el Sabio , en la...
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