Seguro Social en Estados Unidos 2024: estrategias para ahorrar y recortar importantes gastos
La jubilación presenta nuevos desafíos financieros, especialmente cuando el Seguro Social representa la mayor parte de los ingresos en Estados Unidos. Reducir el tamaño del hogar y mudarse a un lugar con un costo de vida más bajo no solo ayuda a los jubilados a disminuir sus gastos, sino que también les permite disfrutar de una mayor seguridad y calidad de vida en sus años dorados.
Uno de los gastos más significativos a recortar es el relacionado con la vivienda. Disminuir o eliminar los pagos hipotecarios y otros costos asociados a la propiedad puede ser clave para mejorar la calidad de vida de los jubilados. Según Rand.org, los costos de vivienda representan aproximadamente el 25% de los gastos de los estadounidenses mayores de 65 años.
En 2021, los propietarios de viviendas mayores con hipoteca tenían costos mensuales de aproximadamente US$1.470, en comparación con los propietarios sin hipoteca, que pagaban una media de US$520, y los arrendatarios, cuyos costos eran de US$940 mensuales, según la American Community Survey. Esto hace que para los jubilados tenga sentido reducir el tamaño de su hogar o considerar mudarse a una región más económica.
Disminuir los pagos de la hipoteca
Minimizar o eliminar los pagos de hipoteca permite a aquellos con ingresos fijos destinar ahorros para cubrir gastos que probablemente aumenten con la edad, como los costos de atención médica. Fidelity estima que el gasto anual en salud casi se duplica entre los 55 y 75 años, y que una pareja jubilada mayor de 65 gastará alrededor de US$300.000 en atención médica durante la jubilación.
Menos reparaciones en el hogar
Poseer una casa más económica no solo reduce los pagos de hipoteca, sino que también implica gastar menos en mantenimiento. Las reparaciones en el hogar son el gasto inesperado más común entre los jubilados, según la Society of Actuaries. Este gasto financiero sorpresa puede mitigarse al tener una vivienda más pequeña que requiera menos mantenimiento.
Además, mudarse a una casa más económica puede traducirse en mayores ahorros para la jubilación. Investigaciones de Vanguard indican que las personas de entre 60 y 69 años tienen un alto potencial para desbloquear el valor neto de su hogar mediante la reubicación, lo cual puede inyectar más dinero a su fondo de jubilación, un recurso útil para aquellos que viven con ingresos limitados.
Un costo de vida más bajo
Una reubicación estratégica también puede ayudar a reducir otros gastos importantes que pueden consumir los ingresos del Seguro Social. Por ejemplo, mudarse a un lugar con buen acceso al transporte público puede eliminar la necesidad de poseer un automóvil, otro gasto significativo para los jubilados. La Asociación Americana del Automóvil estima que el costo anual de tener un automóvil supera los US$12.000, un gasto prohibitivo para la mitad de los estadounidenses que dependen principalmente del Seguro Social.