Se habían anticipado las complejidades que encerraba el desafío de
Argentina en Asunción. Se imaginaba a esta nueva
Paraguay de Gustavo Alfaro como muy complicada. Y así fue. El campeón del mundo ni siquiera aprovechó la ventaja que significa abrir un partido rápido en el partido de las Eliminatorias para el Mundial. Es que la albiceleste arrancó ganando, pero luego no encontró claridad para atacar ni firmeza para defender. La albirroja la superó en todos los aspectos del juego, golpeó justo y disfrutó una victoria más que justa.
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