Esta es la enfermedad por la que más conceden la incapacidad permanente en España
La incapacidad permanente es una condición que se le otorga a alguien cuando esa persona, debido a una enfermedad o accidente, pierde de forma parcial o total su capacidad para trabajar de manera definitiva. Así, este concepto es esencial en el ámbito de la Seguridad Social, ya que busca proteger a aquellos que, por causas ajenas a su voluntad, ya no pueden desempeñar su profesión habitual ni generar ingresos suficientes.
De esta manera, el reconocimiento de la incapacidad permanente, que tiene diferentes grados de afectación, se clasifica en la incapacidad parcial, total, absoluta y de gran invalidez, cada una con características y requisitos específicos. No obstante, para este reconocimiento hay que pasar previamente por un Tribunal Médico que será el encargado, a través de diferentes pruebas médicas y preguntas al paciente, de evaluar los daños reales en la salud y, posteriormente, determinar qué grado de incapacidad se le reconoce o si, por el contrario, no se reconoce ninguno.
En este sentido, en España existe una enfermedad por la que, en la mayoría de las ocasiones, es muy probable que le reconozcan a la persona que la padece la incapacidad permanente y que, además, es una dolencia bastante frecuente en nuestro país.
La enfermedad por la que te reconocen la incapacidad permanente
Según la Sociedad Española de Reumatología, la artrosis es la enfermedad reumática más frecuente en España, que se caracteriza por ser una enfermedad degenerativa que afecta al cartílago articular de una o más articulaciones.
En este sentido, se calcula que la enfermedad afecta a más de siete millones de personas en España, mientras que el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta a aproximadamente 500 millones de habitantes.
De esta manera, puesto que la enfermedad puede afectar a cualquier articulación del cuerpo, aunque en mayor medida cause estragos en las rodillas, también lo puede hacer en las muñecas, manos, columna vertebral, codos y caderas, lo que, en cierta medida, incapacita a la persona a desarrollar tanto su vida personal como profesional de la manera adecuada.
Es por ello por lo que, en la mayoría de las ocasiones, el padecer esta enfermedad es sinónimo de que el Tribunal Médico reconozca a la persona la incapacidad permanente, ya que se pierde movilidad; aunque para ello habrá que demostrar que, efectivamente, se ha perdido significativamente cierta movilidad que imposibilita el seguir ejerciendo. Sin embargo, la ubicación de la artrosis en determinadas articulaciones determinará el reconocimiento, o no, de la incapacidad permanente.
La nueva pregunta trampa de la Seguridad Social
"Uno de los mayores temores que tienen los trabajadores al enfrentarse ante un Tribunal médico de la Seguridad Social es por las preguntas que les hacen". Así comienza su vídeo un famoso abogado laboralista de la red social de TikTok, @tuabogadoparticular.
De esta manera, el letrado asegura que durante la valoración del Tribunal, los miembros del mismo suelen hacer alguna que otra pregunta "trampa" al paciente para asegurarse de si tiene derecho, o no, a la incapacidad permanente.
En este sentido, el abogado laboralista asegura que "ahora la cosa se va a endurecer un poco", ya que, afirma, la Seguridad Social ha implementado una nueva pregunta, de las denominadas como "trampa", con la que intentarán conocer el verdadero estado de salud del trabajador para determinar si se le concede la prestación por incapacidad permanente o no y que, según asegura el letrado, "está dejando fuera a posibles beneficiarios de la pensión".
Así, aunque la pregunta pueda sonar bastante inocente, el Tribunal médico puede preguntar al trabajador que está siendo evaluado si le gustaría seguir trabajando o no. En este caso, el letrado asegura que una respuesta negativa puede tener "graves consecuencias", como rechazar el otorgamiento de la incapacidad al paciente, al poderse entender que está exagerando y que realmente quiere que se le reconozca la incapacidad permanente porque no quiere trabajar.
Además, el abogado laboralista recuerda que el objetivo de la pensión por incapacidad permanente es ayudar económicamente al enfermo durante su periodo de recuperación, motivo por el que la Seguridad Social somete de nuevo, cada dos años, a los pacientes a otro Tribunal médico que vuelva a evaluar su estado de salud.