Piqué, tajante sobre el referéndum: “Lopetegui y Ramos me dijeron que tenía que pedir perdón”
Gerard Piqué habló con TV3 sobre lo que considera su "peor experiencia como profesional". En una entrevista exclusiva con la cadena catalana, el exfutbolista recordó un día clave en la historia reciente de Cataluña y del club azulgrana: el 1 de octubre de 2017, una jornada que marcó un hito tanto en el ámbito político como deportivo. Para ese día, la región vivió una de las jornadas más tensas de su historia contemporánea, con el referéndum de independencia como telón de fondo.
Ese 1 de octubre, los ciudadanos de Cataluña se volcaron en las calles para votar sobre su futuro político. El referéndum, convocado por los movimientos independentistas, buscaba que el pueblo decidiera sobre la autodeterminación de la región, en medio de un clima de confrontación con el gobierno central y un amplio dispositivo policial que intentó frenar la consulta. Las tensiones fueron intensas, y la jornada estuvo marcada por la represión de las fuerzas del orden, que actuaron de manera contundente para evitar la celebración del referéndum, que había sido suspendido por el Tribunal Constitucional.
En ese contexto, el Barcelona debía enfrentarse al equipo de Las Palmas en la séptima jornada de La Liga. A pesar de que algunos pedían la suspensión del partido debido a la gravedad de los acontecimientos, la directiva del club, encabezada por el presidente Josep María Bartomeu, decidió que el encuentro se disputara a puerta cerrada. Una decisión que no fue unánime, ya que varios jugadores, con Leo Messi a la cabeza, presionaron para que el partido se jugara con normalidad. Sin embargo, Piqué no estuvo de acuerdo.
“Fue un día muy complicado. Al final, se jugó un partido que personalmente creo que no debió haberse jugado, pero el club decidió seguir adelante”, confesó el exjugador. En ese sentido, Piqué expresó su postura claramente horas antes del encuentro, escribiendo en Twitter (ahora X): “Manifestémonos pacíficamente. No les demos ninguna excusa. Es lo que quieren. Y cantemos bien alto y bien fuerte. Votaremos”.
A pesar de las tensiones, el Barcelona se impuso por 3-0 a Las Palmas con dos goles de Messi y otro de Sergio Busquets. Sin embargo, lo que trascendió fue el hecho de que ese fue el primer partido en la historia del Camp Nou que se jugó a puerta cerrada. Tras el silbido final, Piqué vivió un momento de gran emoción, visiblemente afectado por la situación. En la zona mixta, el central no pudo evitar emocionarse y calificó aquel día como "su peor experiencia como profesional".
"Me emocioné", relató Piqué, visiblemente tocado al recordar los hechos. Esa misma noche, el futbolista partió hacia Madrid para unirse a la concentración de la selección española, que en ese momento estaba bajo la dirección de Julen Lopetegui y con Sergio Ramos como capitán. Lo que le esperaba en la concentración no fue fácil. Piqué relató que, al llegar a la capital, tanto el seleccionador como Ramos le pidieron que pidiera perdón públicamente por su apoyo al referéndum.
Esa actitud, que reafirmó su postura política, aumentó su imagen de futbolista controvertido, lo que le costó numerosas críticas por parte de ciertos sectores de la afición, especialmente aquellos más contrarios a sus ideas. Durante los partidos posteriores, Piqué fue blanco de constantes abucheos en los estadios. No obstante, el exjugador admitió que, en cierto modo, esa reacción también le resultaba algo atractiva. "Todo eran silbidos, y, aunque debo reconocer que me molestaban en su momento, también debo decir que, de alguna manera, me gustaban", concluyó con una mezcla de ironía y convicción.
“Sorprendentemente, el míster y el capitán me dijeron que debía disculparme. Lopetegui incluso me entregó un discurso escrito para que lo leyera en público”, detalló Piqué. Sin embargo, el defensor catalán rechazó la propuesta. "No lo vi necesario. Yo solo defendí el derecho a decidir de la gente. Tiré el discurso a la basura", reveló sin tapujos.