Unanimidad en el pleno del Consejo de Participación de Doñana reunido este lunes en Huelva, el primero que preside el científico Enrique Mateos como presidente tras la dimisión de Miguel Delibes en julio. El pleno del Consejo ha aprobado por unanimidad el Plan Anual de Trabajo 2025, con más de 300 medidas y que según ha explicado la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García , es «una herramienta clave para garantizar la conservación y sostenibilidad de este espacio único». Dicho plan incorpora medidas para afrontar los retos ambientales más urgentes de este espacio natural y «refuerza el compromiso de la Junta de Andalucía con la preservación de los valores excepcionales de Doñana, un referente a nivel nacional y mundial en biodiversidad y patrimonio natural», ha añadido la consejera. Entre ellas, el «especial énfasis» que García sostiene se ha puesto en la conservación de especies emblemáticas como el lince ibérico, el águila imperial, el milano real y la cerceta pardilla, reflejo de la riqueza natural que define una Doñana. La restauración de las áreas afectadas por el incendio de 2017, «una labor esencial» para «recuperar la resiliencia del ecosistema y mitigar los impactos de eventos pasados», según ha abundado y la puesta en marcha de proyectos financiados a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que han incluido mejoras en los hábitats, la restauración ambiental y la optimización de las instalaciones destinadas al uso público son también algunas de las medidas. La gestión de la finca Veta la Palma también ha ocupado un lugar destacado en el discurso de la consejera. Adquirida por la Junta de Andalucía en diciembre de 2023 por 72,6 millones de euros, esta finca de 7.600 hectáreas representa «un desafío y una oportunidad para consolidar su funcionalidad dentro del equilibrio ecológico de Doñana». En el pleno, la Consejería ha registrado la constitución de una Comisión de Trabajo específica para Veta la Palma , cuya próxima sesión se ha previsto para el primer trimestre de 2025 con la meta de avanzar de manera sostenible en su gestión pública. El Plan de Trabajo 2025 también incorpora la declaración de las zonas periféricas del Parque Nacional, la definición de una zona de amortiguamiento reconocida por la Unesco y el desarrollo de un programa específico de adaptación al cambio climático en Doñana. La intervención de la consejera ha concluido con una reflexión sobre el valor simbólico de Doñana, que ha considerado «no solo un lugar, sino un símbolo de la capacidad colectiva para preservar el legado natural y transmitirlo mejorado a las futuras generaciones». «Este esfuerzo ha requerido rigor, ilusión y el compromiso de todas las partes implicadas. La Junta de Andalucía ha reafirmado su voluntad de seguir trabajando desde el consenso y la colaboración para garantizar que Doñana siga siendo un motivo de orgullo para Andalucía y un referente mundial en la conservación de la naturaleza», ha concluido. El pleno ha contado con la participación del viceconsejero de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Sergio Arjona; la secretaria general de Medio Ambiente y Cambio Climático, María López Sanchís; del director general de Espacios Naturales Protegidos, José Enrique Borrallo; del director del Espacio Natural de Doñana , Juan Pedro Castellano; y del conservador del parque, Miguel Ángel Bravo. Se esperaba la participación del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, pero finalmente no ha acudido nadie en representación del Ejecutivo. El pleno ha coincidido con el nombramiento por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de Sara Aagesen como nueva ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, que relevará a Teresa Ribera , quien pasa a ser comisaria europea. También han estado presentes Jaime Mora, comisionado para el Marco de Actuaciones en Doñana de la Junta de Andalucía; Eloy Revilla, director de la Estación Biológica de Doñana, y Joaquín Páez, presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir , entre otras autoridades.