El cardenal sevillano Miguel Ángel Ayuso Guixot falleció ayer en el Policlínico Gemelli de Roma, donde se encontraba ingresado desde hacía pocos días muy grave víctima de un cáncer . El propio Papa Francisco había avanzado en la misma mañana el delicado estado de salud del Prefecto del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso, uno de los hombres fuertes del Vaticano, señalado que «está muy enfermo» y «al final de su vida». La noticia de su fallecimiento la avanzó ABC de Sevilla en torno a las tres del mediodía. Sus restos mortales, que se encuentran en la capital italiana, se trasladarán a Sevilla para ser enterrados en el panteón familiar del cementerio de San Fernando «el miércoles o el jueves», según informó a este periódico el arzobispo hispalense, monseñor José Ángel Saiz Meneses . Antes, se celebrarán las exequias en la basílica de San Pedro del Vaticano, a la que asistirá el Papa Francisco , si no para presidir la misa funeral, al menos para oficiar un responso, ya que habitualmente estas celebraciones las celebra el decano del Colegio Cardenalicio. Monseñor Saiz Meneses, que ha estado en contacto todo este tiempo con el hermano del cardenal Ayuso, que se encontraba acompañándole en Roma, ha explicado que el traslado de los restos a Sevilla depende de la Embajada Española y de la familia, y que está por determinar la fecha del entierro. Lo que sí ha podido confirmar el arzobispo es que también se celebrará una misa funeral en la Catedral de Sevilla por el alma del cardenal. Sobre la figura de Miguel Ángel Ayuso, el prelado hispalense ha destacado que lo conoció cuando fue nombrado arzobispo en 2021 y que era «un hombre encantador, muy formado, práctico y con conocimiento de la actualidad» . Asimismo, ha hecho énfasis en el carisma misionero comboniano y como especialista en el árabe y el Islam, razón por la cual el Santo Padre lo designó prefecto del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso. No obstante, la relación entre el arzobispo y el cardenal se incrementó después de que éste pasara a formar parte del Dicasterio de los Santos, donde coincidía con monseñor Saiz Meneses en el mismo grupo. «Era un hombre enamorado de Sevilla, muy sevillano , y venía siempre a visitar a su familia». Por su parte, el arzobispo trasladó ayer su pesar por el fallecimiento del cardenal Ayuso a través de su perfil en la red social X, antigua Twitter: «Descanse en paz. Nuestra oración y la oración de la familia diocesana de Sevilla por su eterno descanso y nuestras condolencias a la familia». También la hermandad del Baratillo , a la que estuvo vinculado Miguel Ángel Ayuso, comunicó su fallecimiento: «Una gran persona y baratillero que ha dejado una huella muy profunda en la vida de nuestra hermandad. Lo tendremos siempre muy presente entre nosotros. Rogamos una oración por su alma. Descanse en paz junto a su gran devoción, Nuestra Madre bendita de la Piedad y el Santísimo Cristo de la Misericordia». La Macarena , donde también erahermano el cardenal, también mostró su pesar: «Consternados, lamentamos el fallecimiento de nuestro querido hermano y cardenal Miguel Ángel Ayuso Guixot, prefecto del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso. En la certeza de que ya goza de la presencia real de Dios, rogamos una oración por su alma». El purpurado también pertenecía a la Archicofradía de Pasión, que le recordó de esta forma: «Insigne hermano de la Archicofradía a la que le unían estrechos lazos familiares y devocionales. Misionero comboniano, y presidente del Dicasterio para el Diálogo Interreligioso, honró a esta Archicofradía con su cercanía y su magisterio, presidiendo en no pocas ocasiones el santo sacrificio de la misa ante nuestros sagrados titulares». Por su parte, el Gran Poder también recordó al cardenal, que presidió el 1 de octubre de 2020 la misa del 400 aniversario de la imagen de Juan de Mesa. «Lamentamos profundamente el fallecimiento de nuestro hermano y devoto del Señor».
