Ayuso «muerde» a Sánchez por «cobarde»
En la carrera por meter presión al presidente del Gobierno por sus problemas judiciales y políticos se posicionó ayer la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. En una entrevista con Susanna Griso, en Antena 3, Ayuso marcó el camino que debe seguir la oposición de su partido al Gobierno. Lo hizo un día después, además, de que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, diese a entender que ejecutaba un giro a sus exigencias de dimisión por asegurar que quería que Sánchez se mantuviera en el poder para que no se fuera «con un mínimo de honor». «Aguanta, Pedro, no te mereces irte con honor, te vamos a echar los españoles libre y democráticamente», dijo en Valladolid, con cierta sorna gallega.
Justo este fin de semana, los populares han empezado a hablar con más soltura, fuera del circuito oficial, en todo caso, de que no hay un horizonte electoral cercano y que Sánchez agotará la legislatura. Ante la confusión generada por la ironía de Feijóo, el partido matizó después que siguen reclamando elecciones generales cuanto antes para dar la voz a los ciudadanos. Aunque les viene bien que Sánchez continúe en el poder y que sea el propio horizonte judicial el que le desgaste.
Entre tanto, la presidenta madrileña volvió a exhibir en «Espejo Público» su capacidad de desenvolverse sin caer en ningún argumentario de su partido. Con la frescura y la naturalidad que la caracterizan, y con un discurso muy contundente, asestó golpes inauditos al Ejecutivo para cobrarse la «operación de Estado» diseñada desde Moncloa para destruir su liderazgo.
Ayudo definió al presidente del Gobierno como «un cobarde». Según la presidenta de la Comunidad de Madrid, el líder del PSOE ha sido quien ha «orquestado una operación de Estado» para «intentar» destruirla y para ello ha puesto en marcha «a todos los poderes del Estado». También sostuvo, además, que lo que hay es «corrupción de Estado de arriba a abajo» y criticó que «el sanchismo necesite controlar los medios, los jueces, y sobre todo, extender el miedo».
Para Ayuso, el PSOE es ahora mismo un partido que no puede «tener dos ideas por sí mismo» y que «cada vez que sale a hablar un ministro, todos, como bobalicones, repiten por sujeto y predicado exactamente los mismos mensajes», criticó.
La presidenta aseguró que en el PSOE «hay miedo» y les definió como un partido «norcoreano» donde todos idolatran al líder, al pensar que en «su lado del muro el líder es el bueno». Advirtió, además, de que todo el que critique a Sánchez, «todo el que sea incómodo», será «dilapidado y acuchillado». A su parecer, esto se ha visto en el «ridículo» congreso del PSOE del fin de semana, en el que «de tanto aplaudir han generado más energía eólica que todos los molinos de Aragón».
La apuesta de Ayuso pasa por señalar que el «sanchismo» consiste en acabar con todo aquel que piensa distinto. «Si eres cantante, si eres famoso, si estás formando parte de la cultura, si eres empresario, si eres el que me critica, el que se me pone en medio, ese será acuchillado. Eso es el sanchismo», sentenció.
La presidenta de la Comunidad de Madrid se refirió sin clemencia al ya exsecretario general del PSM, Juan Lobato. Consideró «profundamente desagradable» y «decepcionante» su comportamiento porque «utilizó» una información contra ella y le acusó de «corrupción» cuando la situación de su pareja no tiene nada que ver con la Comunidad de Madrid.
La dirección nacional del PP también buscó el cuerpo a cuerpo contra Sánchez. Después de exhibir gestión este fin de semana en Valladolid frente a la foto de la «ovación» a la corrupción, en referencia a los aplausos del PSOE a Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Así, la vicesecretaria de Sanidad del PP, Ester Muñoz, cargó contra el «congreso de la apología a la corrupción del PSOE» y contra un PSOE que sale de Sevilla «más bunkerizado, aislado y radicalizado a la izquierda». A su juicio, la única renovación de Sánchez fue su «afán de permanencia a toda costa».
La dirección nacional del PP también buscó el cuerpo a cuerpo contra Sánchez. Después de exhibir gestión este fin de semana en Valladolid frente a la foto de la «ovación» a la corrupción, en referencia a los aplausos del PSOE a Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Así, la vicesecretaria de Sanidad del PP, Ester Muñoz, cargó contra el «congreso de la apología a la corrupción del PSOE» y contra un PSOE que sale de Sevilla «más bunkerizado, aislado y radicalizado a la izquierda». A su juicio, la única renovación de Sánchez fue su «afán de permanencia a toda costa».