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Las monedas de 5 centavos de Jefferson Nickel han alcanzado precios exorbitantes en subastas, gracias a errores de acuñación y su escasez. Algunas de estas piezas pueden tener un valor mucho mayor al de su denominación original, convirtiéndose en verdaderos tesoros para coleccionistas en los Estados Unidos. A continuación, te explicaremos cómo saber si tienes usa y comprarlas.
La numismática, el arte de coleccionar monedas, otorga gran importancia a los detalles únicos y la historia detrás de cada pieza. Para los expertos, pequeños defectos de producción o vínculos históricos pueden transformar una simple moneda en un objeto de gran valor económico.
Entre las monedas de níquel más buscadas por coleccionistas, destacan cinco ejemplares de Jefferson que no solo son raros, sino que han alcanzado precios elevados en subastas internacionales.
Las monedas más valiosas del mercado estadounidense
Entre las piezas más codiciadas se encuentran las siguientes: moneda de Jefferson 1938-D, la cual fue Fabricada en Denver y se vendió en 2022 por US$ 33. 600, gracias a los detalles únicos en los escalones del Monticello en el reverso, visibles solo en ejemplares en perfecto estado.
Además, la moneda de Jefferson 1964 solo cuenta con hasta 50 ejemplares reconocidos. Esta pieza es una de las más raras y buscadas a nivel mundial. En 2016, por ejemplo, una pieza se subastó por US$ 32.900, utilizada como moneda de prueba para nuevos troqueles, lo que incrementa su exclusividad.
Errores de acuñación: un factor clave para los coleccionistas de monedas
Los errores en la acuñación son un aspecto clave que multiplica considerablemente el valor de las monedas. Ejemplos notables incluyen:
- Moneda de Jefferson 1940-1938: esta moneda se distingue por un error en el troquel que mezcló los años 1938 y 1940. En 2011, un ejemplar en excelente estado se vendió por US$28.750, convirtiéndose en una de las más apreciadas por los coleccionistas.
- Moneda de Jefferson 1939-1940: otro error notable se suscitó con esta moneda, que combina un reverso de 1940 en una pieza de 1939. Su rareza la llevó a alcanzar un precio de US$ 23.500 en una subasta de 2014.
Unidades en perfecto estado: un desafío para los coleccionistas en USA
El desgaste natural de los troqueles también influye en el valor de las monedas. Un ejemplo de ello es la moneda de Jefferson 1962, la cual es conocida por las complicaciones de desgaste en los troqueles utilizados para acuñarla, encontrar ejemplares en perfectas condiciones es extremadamente difícil. En 2013, una pieza impecable se vendió por casi US$21.150 en la nación norteamericana.