La sección sindical de APFP (Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones) en Córdoba ha denunciado dos nuevos incidentes en la prisión de la capital despues de que se viviera un intento de motín . Este colectivo, en un comunicado, ha manifestado «su honda preocupación por la situación por la que está atravesando el centro penitenciario» de nuestra capital tras acumular otros dos incidentes «muy graves» en las últimas 48 horas. El primer incidente grave se produjo el cuatro de diciembre en el módulo de aislamiento , donde se encuentran los internos más peligrosos . Uno de los presos «incendió y destrozó la celda en la que se encontraba». En medio de una situación de «riesgo», los funcionarios actuaron con «la mayor rapidez posible entrando a la celda para sofocar el incendio». Una vez que accedieron a ella, el interno «les arrojó a la cabeza el lavabo, intentó agredirles a golpes y apuñalarles con cristales rotos y otros elementos». La situación se saldo, gracias a la gran profesionalidad de los trabajadores de la prisión intervinientes. Sí requirieron atención medica por intoxicación de humo y diversos golpes. El mismo 4 de diciembre , se produjo « otro incidente grave más», denuncia APFP. Un interno del módulo 14 «amenazó e intento agredir a los funcionarios de servicio sin más consecuencias». Estos dos incidentes, recuerda esta asociación profesional, se suman a lo ocurrido el día 3 en el módulo 5 a raíz de una pelea entre dos internos. Cuando los funcionarios acudieron y separaron a ambos reclusos, se vieron «rodeados y amenazados» por otros presos. Dichos funcionarios, advierte este colectivo, vieron «comprometida su integridad física y produciéndose un intento de motín de todo el modulo». La situación se resolvió favorablemente, dadas las circunstancias, con el apoyo de, prácticamente, la totalidad de funcionarios de servicio. El episodio se saldó con siete presos aislados y lesiones a un funcionario. Este colectivo profesional finaliza su comunicado advirtiendo de que «la actual masificación que está sufriendo la prisión Córdoba, con casi 1400 internos, y las dificultades que ello implica para una adecuada clasificación, que es la base de la seguridad y convivencia». «A ello hay que unir problemas ya endémicos de este centro como la escasez de recursos humanos , la elevada media de edad de la plantilla de vigilancia, cercana a los 50 años, y la presencia, en el total de efectivos, de un porcentaje de funcionarios en practicas superior al 10%», advierte AFP.