Miguel Moreno Tripp: OECD, ¿La reducción en inflación implica que a los consumidores están mejor?
En un interesantísimo artículo de hace un par de semanas de la OCDE se hace la pregunta que también corresponde con el título que lleva esta columna. Como seguramente Ud. sabe, la inflación es el impuesto a las personas de bajos recursos económicos.
Póngase Ud. en la situación -pesadilla, más bien- por la que atraviesan. A duras penas juntan para el costo de, digamos, un refrigerador. Lo necesitan porque se les echa a perder la comida sin este bien. Sin embargo, cuando van a la tienda, ven que el precio ya subió … y a volver a ahorrar. Pero, como en alguna película en las que el protagonista despierta en el mismo día, como ciclado, cuando vuelven a juntar el monto del nuevo precio … vuelve a subir y nunca alcanzan a juntar el precio que va incrementándose.
La razón es que las personas de escasos recursos no tienen acceso a productos y servicios bancarios que les permita ahorrar y compensar -al menos- el incremento en inflación. Es una pesadilla de la que no pueden salir.
La respuesta corta a la pregunta que plantea la OECD es que por supuesto que los consumidores estarán mejor con tasas de inflación “bajo control”. ¿Qué es bajo control? Para Banxico es una tasa de inflación puntual de 3% con un rango de +/- 1%, es decir entre 2% y 4%. Para Los Estados Unidos, es un objetivo de inflación suave de 2% y para otros bancos centrales, es el 2% (sin rango).
El artículo muestra que, en años recientes, el pico de inflación de los países de la OECD fue poco más del 10% hacia el 2022, proviniendo de tasas de inflación cercanas al 0%. El último dato que presentan es un poco más del 4%. Sin embargo, hacen una precisión sutil pero muy importante que a veces se pasa por alto: “el precio promedio de los bienes de consumo y servicios es, a septiembre de 2024 y para el promedio de países de la OECD, un 30% más con respecto a diciembre de 2019”.
Ese reporte también presenta un cuadro en donde se mide el crecimiento en términos reales de los salarios por hora trabajada. México ocupa el sexto lugar de la OECD, con un incremento de más del 10%. Sin embargo, se tiene que acompañar de productividad o terminarán por cerrarse fuentes de empleo.
Ahora bien, en cuanto a los alimentos y bebidas no alcohólicas, México ocupa el lugar 11 con un incremento acumulado, en el mismo período, de poco más del 30%. En cuanto electricidad y otras fuentes de energía para casas, el promedio de lo que se lleva del gasto de los hogares de la OECD, es del 9%. México, en energía presentó poco incremento del 2019 a mediados del 2023. Sin embargo, desde mediados del 2023, ya fue más significativo.
Aun cuando las tasas altas de inflación han reducido su tasa de incremento, lo cierto es que una inflación alta histórica hace mucho daño no solo en su momento, sino que ya hicieron daño hacia el futuro.
Ps. En las redes se estuvo manejando la noticia de que Luis Videgaray sería asesor para las nuevas rondas de negociaciones del TMEC. Aunque se desmintió, una cosa es la campaña, otra las -erradas o no- convicciones políticas, pero ante todo se debería anteponer el bien de México. Deng Xiaoping lo dejó muy claro: No importa el color del gato, lo importante es que cace ratones. Por eso China es lo que es hoy: pragmatismo.