Guterres condena violencia en Haití
NACIONES UNIDAS, diciembre 9.— El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó este lunes la continua violencia y las pérdidas de vidas en Haití tras la muerte de casi 200 personas entre el 6 y el 8 de diciembre.
En un comunicado divulgado por su portavoz, el titular del organismo pidió a las autoridades del país caribeño una investigación exhaustiva, así como garantías de que los autores de los abusos y violaciones de los derechos humanos sean llevados ante la justicia, señaló PL.
El pronunciamiento fue divulgado luego de que una banda armada matara al menos a 184 personas, entre ellas 127 hombres y mujeres mayores de edad en el barrio de Wharf Jérémie, en Cité Soleil.
Guterres urgió a proporcionar apoyo financiero y logístico necesario para la Misión Multinacional liderada por Kenya, aprobada por el Consejo de Seguridad desde 2023.
Asimismo, instó a todas las partes interesadas haitianas a acelerar el proceso de la transición política.
El Gobierno de transición haitiano reconoció la masacre al asegurar que más de cien personas fueron asesinadas en el barrio de Cité Soleil.
Una nota del Ejecutivo prometió llevar ante la justicia a los responsables de «esta carnicería indescriptible».
La reciente masacre en Haití es un nuevo episodio de la violencia que azota al país, sumido en el control de las pandillas. La violencia allí deja este año un saldo de 5 000 muertos y más de 700 000 desplazados, según datos de la ONU, citados por France 24.
Hace dos meses, otro ataque de pandillas en un pueblo agrícola, ubicado a 96 kilómetros al norte de Puerto Príncipe, resultó en la muerte de unos 80 civiles. La escalada de violencia persiste pese a la presencia de una fuerza policial respaldada por la ONU, conocida como Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, integrada principalmente por agentes de Kenia.
El mes pasado, la violencia alcanzó niveles alarmantes: tres aviones comerciales estadounidenses fueron impactados por disparos mientras operaban en el aeropuerto internacional de Puerto Príncipe. Como resultado, el aeropuerto permanece cerrado, y American Airlines suspendió sus operaciones hacia Haití hasta al menos el próximo año.
El despliegue de tropas en Haití ha resultado insuficiente hasta ahora. Solo se han enviado 400 efectivos, lejos del mínimo de 2 000 necesario para que la misión pueda responder de manera efectiva a la creciente inseguridad causada por las bandas armadas que operan en el país, agregó el medio informativo francés.
A lo largo de su historia, las intervenciones internacionales han sido señaladas por no resolver problemas de fondo como la corrupción y la fragilidad institucional. Misiones anteriores, como la Minustah, no lograron fortalecer a la Policía Nacional de Haití lo suficiente para garantizar la seguridad pública, lo que provocó un aumento de la violencia y el descontento social. Este historial genera desconfianza entre la población haitiana hacia las fuerzas internacionales, a menudo percibidas como ineficaces o incluso perjudiciales debido a denuncias de abusos y escándalos.