Ratificada la condena de abuso sexual a Hugo Mallo por tocamientos a la mascota del Espanyol

La Sección Octava de la Audiencia Provincial de Barcelona ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por la defensa de Hugo Mallo, condenado en septiembre por el Juzgado de lo Penal número 19 de la Ciudad Condal por un delito de abuso sexual a una mujer que trabajaba como mascota del Espanyol. Los hechos sucedieron el 24 de abril de 2019 en la previa del partido entre el club perico y el Celta. En una resolución tajante y unánime, el tribunal ha confirmado en su totalidad la sentencia que lo condenó, subrayando que se ha alcanzado "plena convicción de que los hechos sucedieron tal y como los relató la víctima".

La decisión, que fue adoptada por el tribunal compuesto por seis jueces y juezas (tres mujeres y tres hombres), refuerza la condena impuesta en el primer juicio y avala la versión de la víctima, corroborando la veracidad de su relato. Según el fallo, el tribunal no ha encontrado elementos que cuestionen la versión de los hechos presentada en el juicio y considera que los testimonios y pruebas presentados son contundentes.

El caso, que ha estado en el centro de la atención mediática desde su inicio, ha suscitado reacciones tanto en el ámbito judicial como en la sociedad, dada la relevancia pública de Hugo Mallo, un conocido exfutbolista. Pese a los intentos de la defensa de anular la sentencia apelando a diversas cuestiones jurídicas, la Audiencia Provincial ha mantenido la condena, destacando que no existen dudas razonables sobre la comisión del delito.

Este fallo judicial marca un precedente importante en la lucha contra los abusos sexuales, reafirmando el compromiso de los tribunales con la protección de las víctimas y la imparcialidad en la evaluación de los hechos. La resolución también pone de manifiesto la eficacia del sistema judicial para garantizar que los derechos de las víctimas sean respetados y defendidos, independientemente de la identidad o posición social de los acusados.

Con esta decisión, se cierra una etapa del proceso judicial en el que la justicia ha ratificado la veracidad de las denuncias y ha reafirmado la condena, sin lugar a dudas sobre la gravedad de los hechos.