Path of Exile 2 vs. Diablo 4: ¿Qué RPG jugar? Diferencias de historia, duración, jugabilidad y endgame
Con la llegada de
Es una competencia directa, además por tratarse de juegos con enfoques artísticos no demasiado distantes. Adoptan una línea madura, sombría, con mundos demoníacos. Tienen multijugador que fomentan la cooperación, su comunidad está formada mayoritariamente por jugadores muy dedicados, y por ello ambos juegos también cuentan con un soporte continuo. Pero, ¿cuáles son las diferencias y por cuál de ellos deberías decantarte si no puedes dedicarle el tiempo suficiente a los dos? Aquí te acercamos las principales diferencias que existen entre Path of Exile 2 y Diablo 4.
Path of Exile 2 posee una ambientación tétrica, de fantasía muy oscura que recuerda a los anteriores juegos de Blizzard. Es sangriento y macabro, con un estilo crudo, también dado por una banda sonora que en todo momento te sugiere lo peligroso que es el entorno en que te encuentras. Te encuentras ante el mundo oscuro de Wraeclast, tiempo después de los acontecimientos del primer juego (se ambienta 20 años después), con la corrupción inundando hasta su último rincón.
Diablo 4 destaca por recuperar algunos de los rasgos los juegos originales, con un toque oscuro y maduro, reflejo de la crudeza de Santuario. Su trama es elaborada, con una narrativa bastante presente, giros de guion, sorpresas y momentos interesantes. Tiene una narrativa más lineal y cinemática, al contrario que la de su contrincante, que es más fragmentada, con el lore repartido entre textos y misiones. Poseen distintos enfoques, pero planteamientos no demasiado dispares.
Path of Exile 2 destaca por un estilo hack 'n slash de mecánicas profundas que requiere hacer un posicionamiento estudiado y administrar bien los recursos. Los desarrolladores también quieren que hagas un uso optimizado de tus habilidades, y que te fijes muy bien en los enemigos y cómo actúan, puesto que es importante para hacerles frente. Es tal vez un enfoque más clásico que el de Diablo 4, con un toque más estratégico, táctico y desafiante, aunque sin abandonar por completo el concepto de accesibilidad.
Diablo 4 hace gala de su combate clásico, con hordas de enemigos y montones de peligros, dando lugar a un sistema combativo satisfactorio y muy divertido. Como novedades a resaltar en esta entrega, tenemos la esquiva y una mayor introspección en los jefes finales, los cuales destacan por una mayor complejidad. Tal vez es un estilo más accesible y dinámico, pero que tampoco supone un cambio enorme con respecto a su competidor.
Path of Exile 2 cuenta con 8 clases en su acceso anticipado que se manejan de forma muy diferente, con una personalización vastísima. La progresión está cuidadísima, con un árbol de talentos con más de 500 nodos, lo cual es algo espectacular incluso para un juego de este estilo. Podemos escoger especializaciones, el sistema de equipamiento permite modificar las habilidades de las armas Todo es muy completo, y a pesar de ello no se hace abrumador al comenzar de jugar, lo cual es otro factor a tener en cuenta. Está más enfocado al jugador que le gusta diseñar sus "builds" y cuidarlas al máximo. Su curva de aprendizaje es, por tanto, más elevada y puede llegar a abrumar a los recién llegados.
Diablo 4 nos presenta 5 clases que podemos adaptar fácilmente a nuestro estilo de juego, al ser realmente polivalentes. El árbol de habilidades es complejo pero al mismo tiempo muy personalizable, en el sentido de que siempre podemos darles un toque especial. Además, a partir del nivel 50 se abre un panel de leyenda con aún más opciones, lo que habla muy bien de la profundidad del juego de Blizzard. Aún así, su nivel de entrada es más bajo que en el caso de PoE2, el cual requiere de más tiempo para comprenderlo.
Path of Exile 2 no tiene mundo abierto sino que defiende un diseño tradicional, en este caso dividido por actos, cada uno relacionado con una base de operaciones y una área instanciada. Eso sí, los territorios a explorar son extensos y disponen de múltiples rutas y secretos, además de desafíos. Esto fomenta la exploración mientras compruebas que hay variedad de biomas, con selvas, desiertos, ruinas, criptas, etc.
Diablo 4 propone un mundo abierto con 5 regiones en que no hay pantallas de carga para moverse entre las principales zonas de juego. Dispone de viaje rápido también, e igualmente cada zona dispone de su propia identidad temática. Es un mundo muy vivo en que hay cantidad de NPCs, secretos, eventos Se podría decir que va un paso más allá en el género, innovando con respecto a PoE2, que es un planteamiento más clásico y purista.
Path of Exile 2 no tiene tantas misiones secundarias, aunque posee eventos ocultos en áreas secretas que incentivan la exploración. Esto permite enfrentarte a jefes y desafíos opcionales, además de misiones temporales y eventos globales. Pero lo que sí podemos decir es que su endgame es apabullante, y va un paso más allá que su competidor. Hay salas de esquema roguelike con oleadas de enemigos y jefes. Luego hay otra prueba con una brecha de corrupción que genera enemigos en el escenario y que hay que derrotar a toda velocidad. También tenemos Atlas, que permite personalizar y generar proceduralmente todas las actividades endgame. Básicamente, es infinito, aunque está diseñado para jugadores expertos.
Diablo 4 posee una campaña que dura algo menos de 30 horas, aunque puede irse fácilmente a más del doble de tiempo o mucho más si somos completistas. Es un juego que agradece que no vayas rápido y te entretengas con lo mucho que contiene. Tiene eventos aleatorios, más de 150 mazmorras secundarias y un buen puñado de misiones que además son interesantes en lo narrativo. También hay un endgame poderoso, que permite acceder a nuevas dificultades, objetivos temporales y enfrentarnos a las mazmorras de pesadillas.
Path of Exile 2 recupera la estética de los juegos clásicos del género, y en particular los primeros Diablo. Esto se aprecia sobre todo en el apartado artístico, con entornos y personajes más viscerales y decrépitos. No está tan enfocado en el realismo, pero sabe ofrecer entornos y diseños detallados, con una interfaz que -por cierto- es tan densa como recordábamos antaño en este tipo de experiencias roleras.
Diablo 4 no ofrece un apartado artístico tan oscuro como el de PoE2, pero sí que recupera parte de la oscuridad de los primeros juegos y se nota que en ese sentido quiere volver a los orígenes. Sus gráficos reflejan un ambiente decadente, con ese aspecto pulido que es tan habitual en las producciones de Blizzard. Alta calidad, efectos detallados y estética realista se unen a una interfaz más accesible y minimalista que en otras ocasiones, distanciándose en este sentido de su contrincante (aunque tampoco de forma exagerada).
Después de todo lo comentado, la conclusión es que Path of Exile 2 está más recomendado para jugadores expertos en el género de la acción RPG, mientras que Diablo 4 podría ser más adecuado para nuevos jugadores y obviamente la inmensa ola de fans de la obra de Blizzard.
PoE2 es un título muy purista, un RPG de los de antes, con toques muy clásicos y un aspecto desafiante que puede llegar a intimidar. No es que descuide su accesibilidad, pero en este caso Diablo 4 es un videojuego que ofrece un aspecto más amigable, sin que ello suponga una falta de profundidad.
En esencia, si quieres un juego profundísimo y eres un usuario avanzado o que cree que le gusta experimentar una aventura desafiante para aventureros curtidos, tu opción es Path of Exile 2. Si también te llama la atención este planteamiento, pero prefieres un enfoque de acción inmediata, y no te importa tanto la personalización o pasar tiempo haciendo "builds", probablemente te interese más Diablo 4. No obstante, ambas propuestas no son en ningún caso excluyentes, y lo más recomendable sería que, si tuvieses el suficiente tiempo, llegaras a probar ambos títulos, puesto que ofrecen perspectivas muy interesantes (y complementarias) sobre el mismo género.