El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha decidido ceder en dos de las demandas claves que Israel planteaba sobre la mesa para alcanzar un acuerdo de alto al fuego, según publica el diario estadounidense 'Wall Street Journal'. Estos dos requisitos fundamentales son que Hamás aceptaría que las tropas israelíes permanezcan temporalmente en Gaza mientras cesan los combates y liberarían una serie de rehenes cuya lista de nombres ya estaría en posesión de Tel Aviv, según informa el periódico estadounidense. De esta manera, Israel y los palestinos están dando señales de nuevos esfuerzos para forjar un acuerdo de alto el fuego, aunque sea limitado, que pondría en pausa los combates en Gaza y devolvería a Israel a algunos de los rehenes que aún se encuentran retenidos en el enclave palestino. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz , ha comunicado a su homólogo estadounidense, Lloyd Austin , en una llamada telefónica que ahora existe la posibilidad de un nuevo acuerdo que permita el regreso de todos los rehenes, incluidos los ciudadanos estadounidenses, según ha informado la oficina de Katz. Sin embargo, un diplomático occidental en la región ha dicho, según recoge Reuters, que se estaba concretando un acuerdo, pero que probablemente tendría un alcance limitado, ya que implicaría la liberación de sólo un puñado de rehenes y una breve pausa en las hostilidades. Una tregua y una liberación de ese tipo serían apenas las segundas desde el inicio de la guerra en octubre de 2023. El optimismo cauteloso surge mientras el asesor de seguridad nacional del presidente estadounidense Joe Biden , Jake Sullivan , se dirige a Israel para conversar con el primer ministro Benjamín Netanyahu el jueves y luego a Egipto y Qatar, co-mediadores con Estados Unidos para un acuerdo. Por otra parte, el presidente electo Donald Trump ha exigido que los militantes del grupo palestino Hamás liberen a los rehenes retenidos en Gaza antes de que asuma el cargo de Biden el 20 de enero. De lo contrario, Trump ha dicho que habrá «un infierno que pagar». El enviado designado de Trump para los rehenes, Adam Boehler , ha dicho que él también está involucrado, habiendo hablado ya con Biden y Netanyahu. Israel dice que 100 rehenes siguen cautivos en Gaza. Se cree que siete son ciudadanos estadounidenses. Citando la amenaza de Trump de «pagar el infierno», Boehler dijo la semana pasada al canal de noticias israelí 13: «Haría un llamamiento a aquellas personas que han tomado rehenes: hagan su mejor trato ahora. Háganlo ahora porque cada día que pase, será cada vez más difícil y se perderán más vidas de Hamás». Aunque Biden y Trump están trabajando por separado, sus esfuerzos se superponen y ambos se beneficiarán de un acuerdo. Un funcionario estadounidense ha dicho que las declaraciones públicas de Trump sobre la necesidad de un alto el fuego rápido «no han sido perjudiciales», informa Reuters. El funcionario ha dicho que la prioridad es llevar a los rehenes a casa, ya sea al final del mandato de Biden o al comienzo del mandato de Trump. Steve Witkoff , el enviado designado de Trump para Oriente Medio, se reunió por separado a finales de noviembre con Netanyahu y el primer ministro de Qatar, el jeque Mohammed bin Abdulrahman Al Thani , informó una fuente informada sobre las conversaciones. El momento para un acuerdo puede que nunca haya sido mejor políticamente para Netanyahu. El primer ministro ha dicho que el creciente aislamiento de Hamás tras el colapso del gobierno del presidente sirio Bashar al Assad ha abierto la puerta a un posible acuerdo de rehenes, aunque era demasiado pronto para proclamar su éxito. El jefe militar de Israel y el jefe del servicio de seguridad interna Shin Bet estuvieron en El Cairo el martes para discutir los cruces fronterizos de Gaza después de la guerra y su administración, según tres fuentes de seguridad israelíes. El optimismo público de los líderes israelíes durante la semana pasada ha coincidido con el tono general en las discusiones internas a puerta cerrada, según un funcionario israelí. Para Netanyahu, las concesiones serían mucho más fáciles ahora que Israel ha restablecido su reputación como la fuerza más poderosa de Oriente Próximo y sus enemigos respaldados por Irán en Gaza, Líbano y Siria ahora representan una amenaza menor. La coalición de Netanyahu, que ha pasado por momentos de dificultad, se ha fortalecido con la incorporación del ministro de Asuntos Exteriores Gideon Saar y su facción más centrista. Netanyahu, tras haber logrado un alto el fuego con Hizbolá en el Líbano, puede completar el panorama con la devolución de los rehenes en un acuerdo con Hamás. Durante el año pasado, algunos de los ministros de extrema derecha de su gabinete habían expresado objeciones, incluso amenazando con derrocar al Gobierno, si la guerra en Gaza terminaba. Pero con los enemigos de Israel debilitados y su coalición fortalecida, Netanyahu es mucho menos vulnerable políticamente. Saar dijo el pasado lunes que Israel ahora era más optimista sobre un posible acuerdo sobre los rehenes en medio de informes de que Hamás había pedido a otras facciones de Gaza que lo ayudaran a recopilar una lista de rehenes israelíes y extranjeros bajo su custodia, ya sea vivos o muertos. Un funcionario palestino cercano a las conversaciones y familiarizado con las posiciones de todas las partes involucradas describió lo que llamó «una fiebre de negociaciones» con ideas emergentes de todos los lados, incluso entre los mediadores en Egipto y Qatar. La participación de Trump ha dado un impulso a las conversaciones, aunque las partes aún no han presentado listas de prisioneros y rehenes palestinos que serán intercambiados ni han completado los planes para una tregua temporal o por fases, dijo el funcionario palestino. Dijo que Hamás estaba dispuesto a mostrar cierta flexibilidad si hubiera garantías de que Israel no reanudaría los combates. No está claro cómo las partes pueden superar la brecha más grande que ha persistido a través de numerosas rondas de negociaciones fallidas: Hamás exige el fin de la guerra, mientras que Israel dice que la guerra no terminará antes de que Hamás ya no gobierne Gaza. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken , ha viajado junto al ministro alemán de Asuntos Exteriores, Boris Pistorius , a Jordania y Turquía para mantener conversaciones sobre Siria, según informa el Departamento de Estado. Israel no está en su itinerario oficial, pero siempre existe la posibilidad de que añada una escala.
