Paolo Rocca pide que el Gobierno 'nivele la cancha' para que la industria argentina sea más competitiva

 El CEO del grupo Techint, Paolo Rocca, pidió a industriales que sean "protagonistas y no víctimas del cambio", al mismo tiempo, que insistió en su reclamo al Gobierno para que les "equilibre la cancha". En este sentido, apuntó a la fuerte carga impositiva y a las complejidades que le genera a los industriales el avance de China. 

"Nivelar la cancha implica reducir el contenido impositivo, que actualmente es de 32%, un promedio muy alto frente a nuestros competidores. Algunos de estos no están en ningún lugar: ingresos brutos, impuesto al cheque, impuestos municipales, que sé que el Estado Nnacional tiene dificultad para intervenir ahí, pero es algo que genera una diferencia importante",  expresó el empresario al exponer al cierre del 23° Seminario ProPymes, que se desarrolló en el Centro de Convenciones de Buenos Aires. 

"Tenemos temas laborales: conflictividad, costo del trabajo y 40% de costo impositivo adicional al costo de trabajo. Y un tema relevante también es la infraestructura", completó.  

En este sentido, y ante un auditorio lleno, es que le pidió al funcionario presente que se alinee la apertura de la economía a los tiempos de las empresas industriales, para evitar que "se pierda capacidad, conocimiento, que después es muy difícil de construir".

Rocca pidió que se lleve adelante un trabajo en equipo para poder ser protagonistas del reset de Argentina, y con ello, ganar competitividad a nivel mundial. Y señaló que, además de nivelar la cancha, es necesario que se  avance en paralelo con la introducción de innovación, tecnología y capacitación.

Si bien su postura se mantuvo en la misma línea que lo expuesto en Alacero Summit y reconoció los logros de la gestión Milei, en esta oportunidad, el CEO de Techint fue más insistente respecto a la necesidad de que "el Gobierno este abierto al diálogo y escuche las necesidades del sector con empatía". 

"La actividad económica está empezando a repuntar, ha superado el punto más bajo. Falta un punto importante que el mismo presidente Milei ha marcado, la eliminación de la restricción cambiaria. Es un tema muy importante para muchas de las empresas, que en definitiva tienen que poder también realizar una pequeña inversión en Brasil, comprar un galpón para distribuir sus productos, tener un depósito en el exterior, cuestiones imposibles hoy en día", enumeró.

China, otro partido

Más allá del pedido de baja de la carga impositiva, hay otro punto en el que insistió Rocca: la competencia con China.

"Acá hay creatividad, voluntad y capacidad pero es necesario nivelar la cancha para que nos permita competir. Este esquema industrial, esta cadena de valor y toda la industria argentina, que ocupa 1.400.000 personas, mitad en la Provincia de Buenos Aires, tiene un impacto directo e indirecto muy superior sobre el producto bruto", expuso.

Entonces, fue directo al punto: "Esta cadena de valor tiene la capacidad de tomar el desafío y competir con Brasil, EEUU y Europa pero la cancha tiene que estar nivelada. No podemos competir con China porque juegan otro partido, con una intervención del Estado en la economía y en las reglas laborales, en la locación del capital, en la promoción de las inversiones en el comercio exterior y en la restricción de la propiedad intelectual". 

El Secretario de Coordinación de Producción, Pablo Lavigne, respondió que desde el Gobierno trabajan, tal como expuso recientemente el Presidente, en los lineamientos para que en 2025 se pueda implementar una transformación impositiva integral, la eliminación del cepo y las 3.200 nuevas reformas para así "mejorar la competitividad de las empresas argentinas".

Al terminar su exposición, Rocca sostuvo en un breve diálogo con la prensa que "hay que ver si finalmente se llevan a la práctica las reformas propuestas". Y agregó que, por la postura del secretario, "se monitoreará más de cerca lo que pasa con China".

En este orden, fue tajante y afirmó que Argentina debe definir su postura respecto a China, situación que incluso el propio Gobierno de los Estados Unidos le demandará a sus socios comerciales.