La caída del régimen sirio el pasado 8 de diciembre ha producido una grave inestabilidad y desequilibrio estratégico en el complicado laberinto bélico de Oriente Medio en el que están compitiendo por conseguir el máximo protagonismo y poder distintos actores tanto regionales como internacionales. El grupo fundamentalista suní, Hayat Taharir al Sham (HST), líder de la rebelión, ha nombrado a Mohamed el Bachir, antiguo jefe del gobierno paralelo instaurado en la provincia de Idlib, como primer ministro interino para llevar a cabo un proceso de transición junto al primer ministro saliente, Mujamad al Yalali, con un claro mensaje de respetar a minorías como los cristianos, drusos o alauitas. Dicho proceso debe terminar el 1 de marzo de 2025. Sin embargo,...
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