Es una edición limitada a tan solo 750 unidades numeradas para todo el mundo, que representa la máxima expresión del estilo icónico de la Bobber. Destaca por su meticulosa manufactura artesanal, un diseño exclusivo con detalles pintados a mano y materiales de primer nivel. Con una parte ciclo optimizada con componentes de altas prestaciones y su motor bicilíndrico de 1.200 centímetros cúbicos de cilindrada especialmente puesto a punto y con silenciadores Akrapovic para ofrecer un rendimiento contundente, esta Triumph está concebida para quienes buscan una combinación inigualable de diseño, exclusividad y tecnología de vanguardia en una moto única que refleja la herencia y la innovación de la marca británica. La Bonneville Bobber TFC, desarrollada bajo el sello Triumph Factory Custom, representa la cúspide de la personalización y el diseño único en la familia Modern Classics. La marca ha creado esta edición limitada pensando en aquellos que buscan algo más que una motocicleta: un símbolo de estilo y autenticidad. Entre sus cualidades destaca un exclusivo acabado de pintura bitono con detalles texturizados en dorado de aspecto marmoleado pintados a mano en su depósito y en los paneles laterales para elevar al máximo su impacto visual. Para añadir un toque aún más personal, cada depósito de combustible está firmado a mano en la parte inferior por el maestro pintor y la tija de cada una de las unidades, de aluminio mecanizado, luce una insignia con su número de serie grabado a mano. Destaca desde el detalle dorado de la llave hasta el asiento de cuero grabado con el escudo triangular de Triumph todo ello con un lujoso atractivo. Junto a su exclusiva pintura aplicada a mano, los brillantes paneles laterales y los soportes del guardabarros de auténtica fibra de carbono lacada se puede encontrar innumerables pinceladas de estilo tales como las barras doradas de la horquilla y sus ajustes en la parte superior, también anodizados en el mismo color; los emblemas en las tapas del motor, mecanizados y con intrincados detalles dorados hechos a mano; y la cadena dorada a juego resaltan la meticulosa atención a los detalles en todo el conjunto. Paul Stroud, Director Comercial de Triumph, comenta: «sabemos que más del 70% de nuestros clientes de Modern Classics personalizan su moto con accesorios. Por eso, nuestros ingenieros de diseño, inspirados por la pasión de la escena custom global, se han propuesto crear la moto más bonita, exclusiva y deseable posible». Y añade: «esta Triumph Factory Custom es simplemente excepcional. Desde su exclusivo acabado de pintura hasta sus componentes de alta gama y los detalles dorados, cada pieza se ha manufacturado con una precisión inigualable». El resultado es un modelo que no solo es todo un ejercicio de diseño, sino que también ofrece un rendimiento a la altura de su estética. Esta edición limitada no solo destaca por sus acabados, sino también por sus avanzadas especificaciones. Su legendario motor bicilíndrico Bonneville de 1.200 centímetros cúbicos está especialmente puesto a punto para alcanzar una potencia máxima de 78 caballos a 6.000 revoluciones por minuto y rendir su par máximo de 106 newton/metro a tan solo 3.750 revoluciones. Con una mayor capacidad de respuesta a bajas revoluciones, la TFC proporciona una inmediata sensación de potencia sin esfuerzos. Además, esta versión tan especial incorpora un nuevo modo de conducción Sport, que se suma al Road y al Rain, y que proporciona una respuesta del acelerador aún más instantánea. Y como guinda de este exquisito pastel, los llamativos escapes Akrapovic biselados con embellecedores de fibra de carbono emiten un profundo sonido «hot-rod» que combina a la perfección con el carácter contundente de la motocicleta. Para completar el modelo, presenta una significativa reducción de peso de más de 5 kilogramos respecto a la Bobber estándar e incorpora suspensiones Öhlins, delante y detrás, y potentes pinzas de freno radiales monobloque Brembo M.50 con bomba de freno Brembo MCS, que aportan control, precisión y confianza a su conducción ya de por sí ágil y emocionante. A esto se suman los nuevos semi-manillares, con anclajes de aluminio macizo a la horquilla en posición alta, que proporcionan una posición de conducción deportiva y dominante. Triumph ha diseñado esta Factory Custom con toda la tecnología sutilmente integrada sin modificar su estética atemporal, demostrando que la innovación y el estilo clásico pueden coexistir en perfecta armonía. El control de tracción garantiza la estabilidad en todas las condiciones, aportando confianza en la conducción. El nuevo grupo óptico suprime el faro trasero en favor de los intermitentes multifunción tipo bala, que proporcionan una funcionalidad completa al tiempo que conservan el aspecto limpio y minimalista de la Bobber TFC. Esta exclusiva pieza de coleccionista de Triumph se entregará a sus futuros propietarios a partir de marzo de 2025 a través de los concesionarios oficiales Triumph a un precio de 20.495 euros.