Sevilla, con un gol de un canterano,
Manu Bueno, al
Celta, le hizo
Jesús Navas un gran regalo en su despedida en partido oficial en el
Sánchez Pizjuán. La leyenda sevillista, con 704 encuentros con su club y 20 años de profesional, era el gran protagonista de una noche histórica. Se marchaba emocionado ante su afición y sufría en el banquillo tras el cambio hasta lograr la victoria. Aunque aún le queda un último baile dentro e una semana en el
Santiago Bernabéu.
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