Nueva huelga de transportes en Navidad: estas son las fechas convocadas
La Navidad es el momento del año donde los sentimientos afloran desde la unión y la solidaridad. Es por eso que, en estas fechas tan señaladas, aquellas personas que llevan cierto tiempo sin ver a sus familiares reservan gran parte de su tiempo para pasarlo juntos. Al mismo tiempo, todos esos trabajadores que, por cuestiones laborales, han tenido que desplazarse fuera de su hogar para labrarse un futuro profesional aprovechan este periodo para volver a casa y ponerse al día con sus seres queridos. Si alguno de estos casos es el tuyo has de conocer la huelga de transportes que afectará al conjunto entero de las fiestas.
Efectivamente, la huelga en IRYO planeada, inicialmente, para el 5 de diciembre fue pospuesta para su comienzo en vísperas de Nochebuena el 23 de diciembre, y continuará durante los días 24, 25, 31 de diciembre, finalizando el 1 de enero, también incluido. Tal y como informaron el Sector Federal Ferroviario de la Confederación General del Trabajo en su comunicado acerca de la convocatoria de la huelga: "El SFF-CGT decidió no convocar huelga los días 5 y 6 de diciembre por no poder cumplir los plazos ya que la reunión del SIMA se celebró el día 26 de noviembre y por lo tanto no podíamos cumplir los diez días necesarios para cumplir con el plazo legal para convocar huelga".
A lo largo del mismo mostraron una visión algo pesimista respecto a sus esperanzas en la evolución de la inactividad. Por ello decidieron no convocar huelga los días 8 y 9 de diciembre, a pesar de que podían haber entrado en el plazo estipulado en el reglamento. Es por ello que deciden centrar toda su protesta en las fechas antes mencionadas, donde realmente pueden verse afectados, tanto los trabajadores como los clientes. No obstante, también declaran que acudirán a las próximas dos reuniones de la dirección para tratar de llegar a una solución conforme para ambas partes.
Los motivos de la huelga
Para encontrar el origen de la problemática hemos de saber que las protestas llevan siendo las mismas en términos de derechos laborales desde hace más de dos años. De hecho en el informe se asegura que estas reivindicaciones llevan siendo ignoradas "reunión a reunión" por parte de la Dirección de la empresa IRYO. Es por eso que, con vistas a alcanzar una luz que ilumine el camino, las próximas juntas que se celebrarán deberán favorecer las condiciones entre trabajadores para evitar que la huelga pase a mayores: "Acudiremos a las reuniones con el mismo objetivo que a las anteriores, que se finalice la desigualdad entre colectivos y se cumpla con lo regulado por ley".
"Las dietas que no generen desigualdad, para el colectivo de ASISTENTES" es la primera demanda de los motivos por los cuales los trabajadores siguen sufriendo el descontento generalizado que presentan. La otra enmienda reside en "la compensación en nocturnidad para quien la trabaje" que se equipare a lo que merecen los demandantes por operar durante esas horas en concreto.
La posible (no) resolución del conflicto y el preacuerdo de Iryo
La probable llegada del convenio puede que llegue en las futuras conversaciones entre los afectados con los demandados, las reuniones de las que hablábamos. Sin embargo, si las injusticias no cesan por parte de la empresa la contienda seguirá su camino llegando a un punto de no retorno en el que se intensificará. "Pero la realidad es que el derecho a hacer HUELGA es un derecho CONSTITUCIONAL que todos y todas podemos llevar a efecto en defensa de nuestras reivindicaciones" exclama la agrupación. Por lo que habrá que esperar para ver si finalmente llega el ansiado acuerdo.
De momento se ha informado a los trabajadores la firma por parte de IRYO de un preacuerdo con el que los currantes recibirían un plus de nocturnidad de 2,7 euros la hora y 12 euros totales de dieta, ambos brutos. Este primer acercamiento, aunque parece ser un buen indicio que conlleve en un futuro a la resolución de la contienda, ha causado revuelo en los damnificados y, al mismo tiempo, ha producido una escisión en los pareceres de los empleados.
De hecho, desde la CGT se oponen a todos aquellos que firmen el acuerdo, calificándoles de "vende-obreros", y reclaman 14,5 euros limpios al día y 8 euros netos por hora en el periodo nocturno. Asimismo, el pacto de los firmantes con la empresa supone entre 120 y 200 euros brutos de subida anual.