En los últimos años, Cristina Pedroche se ha convertido sin duda alguna en la reina absoluta de las Campanadas . La presentadora de Antena 3 encabeza cada año las audiencias de Nochevieja junto a su inseparable Alberto Chicote gracias a su carisma, pero también a la expectación que ha generado con sus polémicos vestidos . Sus looks extremos son cada año uno de los secretos mejor guardados de las Navidades. A sus 36 años , la madrileña cuenta ya con una larguísima experiencia en televisión, siendo uno de los grandes rostros del grupo Atresmedia de la última época. Aunque creció en un barrio humilde y su primer impulso no fue el de dedicarse al mundo de la comunicación, Pedroche ha conseguido alzarse con un gran caché por su participación en programas de éxito como 'Sé lo que hicisteis...', 'Zapeando', 'Pekín Express', 'Love Island' o 'Password', además de sus apariciones navideñas cada 31 de diciembre. Asímismo, su vida personal también ha levantado mucha expectación en los últimos gracias a su mediática relación con Dabiz Muñoz, chef y fundador del restaurante de tres estrellas Michelin DiverXO. El matrimonio, que se conoció hace ya casi una década, cumplió hace unos meses un sueño, el de ser padres , una realidad que ahora tratan de compaginar con su trabajo diario. Te contamos todo lo que debes saber sobre la infancia de Cristina Pedroche, su historia de amor de Dabiz Muñoz y su vida actual tras el nacimiento de su única hija, Laia. Al contrario que otros grandes nombres de la televisión, Cristina Pedroche se crió en el barrio trabajador de Vallecas , en Madrid, donde aprendió a valorar la importancia del esfuerzo. Su padre estuvo un tiempo en el paro, mientras que su madre era limpiadora en un un colegio, lo que le impidió contar con muchos lujos. « Vengo de una familia humilde . Mis padres siempre han sido hormiguitas y han guardado dinero por lo que pudiera pasar», explicó la presentadora en 2019. Al crecer en una familia de clase baja, la presentadora entendió desde bien pequeña que, si quería algunos productos en concreto, debía conseguirlos con su propio esfuerzo. Es por ello que, con tan sólo 16 años, compaginó sus estudios con el trabajo para poder permitirse aquellos caprichos que se salían de lo habitual: «Mi madre me compraba un pantalón, pero yo quería los tres pantalones que me gustaban, así que me los compraba yo », contó la madrileña, que desempeñó labores como azafata de publicidad y dependienta en algunas tiendas. Una vez terminó el bachillerato, Pedroche se licenció en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, algo que complementó con una diplomatura en Turismo . Mientras estudiaba, continuó trabajando como azafata y, a raíz de este empleo, consiguió su primera oportunidad en el mundo de la televisión con el programa 'Sé lo que hicisteis…'. Lo demás es historia: casi dos décadas como reportera y presentadora y toda una marca hecha a su alrededor. La vida de Cristina Pedroche no se entiende ya sin el que ha sido su pareja durante la última década, el famoso cocinero Dabiz Muñoz . Fue en diciembre de 2014, durante un encuentro casual en un evento de una marca deportiva , aunque nada sería lo mismo desde aquella ocasión: «Nunca he sido romántico ni apasionado hasta que entró en el showroom…», contó el cocinero, que no se atrevió a dar el primer paso a pesar de su asombro. Fue la presentadora quien se acercó primero y, desde ese momento, la química fue muy palpable: «Lo bueno es que como tenemos un humor tan parecido, nos reímos mucho, desde el primer momento nos caímos bien », explicó Muñoz, que intercambió el teléfono con ella ese mismo día. Gracias a ella se abrió una cuenta de Instagram , donde ahora acumula casi 1,5 millones de seguidores: «Dije 'esta ha venido para quedarse'», confesaba. De esas primeras conversaciones surgió también su primera cita, aunque muy alejada de lo convencional. Los dos quedaron para correr y, aunque Cristina Pedroche tuvo la mala suerte de ponerse mala ese mismo día, no canceló el encuentro: «Le dije de ir a correr un día y cuando me levanté estaba malísima. Me levanté con fiebre, pero me dio igual porque sabía que él iba a ser para mí », explicó hace años la colaboradora, que metió «un poco de pico y pala» para enterarse de si estaba soltero. Apenas unos días después de conocerse, en enero de 2015, salían a la luz las primeras imágenes de la pareja, que no quiso esconder su amor durante mucho tiempo. Los dos tenían claro que se querían y, apenas 10 meses después de conocers e, se daban el 'sí quiero' en una íntima ceremonia celebrada en su casa. La celebración, por sorpresa y en secreto, tuvo lugar el 24 de octubre de 2015, cuando Dabiz Muñoz consiguió los papeles de divorcio de la que fuera su esposa entre 2010 y 2014, Ángela Montero. Se casaron en el salón de su casa , acompañados tan sólo por sus padres. Fue algo muy improvisado, pues la colaboradora de televisión tenía claro que quería casarse antes de cumplir los 27 años : «Yo lo hice a los 26 y forcé la máquina para que así ocurriera porque es una cifra que va conmigo, es mi número preferido desde siempre y quería casarme con esa edad», contó en Zapeando', el programa de La Sexta donde colabora. No hicieron falta 'looks' de boda: se casaron en vaqueros y, después, él se fue a trabajar y ella a comer a casa de sus padres. «Lo único especial que llevaba puesto era el collar de mi abuela . Siempre la echo de menos, pero esa mañana quizá, un poco más», explicó la vallecana, que tuvo algún que otro desencuentro con su estilista y amigo, Josie , por renunciar a su vestido de boda. En estos 10 años de relación, Pedroche y el chef de DiverXO han conformado una de las parejas más consolidadas del panorama español y han ido creciendo el uno junto al otro. El pasado 2023, Dabiz Muñoz y Cristina Pedroche cumplían un sueño y se convertían en padres por primera vez de una niña a la que llamaron Laia. « Te amaremos y protegeremos siempre. Laia Pedroche Muñoz », escribían los dos el pasado 14 de julio a través de sus redes sociales para anunciar el nacimiento de su primogénita. La llegada de su hija le ha revolucionado la vida al matrimonio, que ha tenido que cambiar muchos hábitos para adaptarse a sus cuidados: « Antes yo no sabía lo que era madrugar . Antes salía del restaurante súper tarde y con lo cual me levantaba más o menos tarde y la palabra madrugar no estaba en mi vocabulario», dijo hace unos meses en una entrevista. «Desde que nació Laia, para que me dé tiempo a entrenar, hacer deporte, trabajar, estar con Laia... Me levanto todos los días entre las siete y las siete y media como un campeón», especificaba, explicando que ha tenido que cambiar su día a día. « Intento llegar por las noches antes a casa y hay días que lo consigo y otros que...», dijo ante la atenta mirada de su mujer. Para Pedroche la maternidad también ha supuesto un absoluto cambio a su día a día y, desde que dio a luz, ha mostrado su lado más vulnerable en sus redes sociales. «Lloro todos los días un poquito. La maternidad es un viaje , yo también he nacido como madre. Tengo nuevos miedos y emociones . Soy feliz, es preciosa, me muero de amor. De repente estoy nerviosa, me meto para dentro, lloro. Mucho amor y muchas sombras . Me había preparado mucho, pero hasta que no lo vives... Lo que he aprendido estos dos meses es estar con buenas personas y madres que pasan por lo mismo», explicó entonces la vallecana, que sigue aprendiendo a conciliar su trabajo con su nueva realidad. Además del vestido, la otra gran incógnita que despierta interés entre los espectadores que siguen cada año las Campanadas con Cristina Pedroche es el sueldo que esta se embolsa por la tarea. Desde hace años, son muchas las informaciones que han salido a la luz respecto a esta cifra, aunque muchos rumores han apuntado a que podría ser de unos 60.000 euros , mientras que Alberto Chicote se embolsaría unos 30.000 . Un información que la propia Pedroche quiso aclarar hace unos años, explicando lo que se escondía realmente detrás de este salario: «Ya sabéis que tengo contrato de cadena . Eso va metido todo ahí dentro . No puedo contar más», explicó la madrileña, aclarando que no recibía ningún plus por presentar el especial del 31 de diciembre. «No lo hago por ganar ni por no ganar porque yo tengo un contrato de cadena y ya sabemos que, si las hago o no las hago, yo gano lo mismo , que también es importante recalcar este tema», replicó entonces la vallecana, dando a entender que no cobra una cantidad concreta por presentar las Campanadas, sino que su retribución total por todo lo que haga para Atresmedia.
