Para JongMay Urbonya, el Hanfu es más que un atuendo tradicional chino: es un puente entre culturas y una ventana a la rica historia de China. A sus 30 años, la influencer cultural estadounidense ha cautivado a casi medio millón de seguidores en línea con su pasión por el Hanfu y su amor por las tradiciones chinas.Sin embargo, su trayectoria está profundamente entrelazada con la historia de sus padres, quienes plantaron por primera vez semillas de apreciación cultural mucho antes de que ella descubriera su conexión con China.JongMay nació en 1994 en Dalian, una ciudad costera en el noreste de China donde sus padres, originarios de Wisconsin, trabajaban como profesores de inglés. Llegaron a China en 1987, durante la primera etapa de la reforma y apertura del país, motivados por la creencia en el poder del entendimiento global."Mis padres solían recordar cómo la hospitalidad y la amabilidad de la gente de Dalian les dejaron una impresión para toda la vida", dijo JongMay, y agregó que "era el Año Nuevo Lunar chino cuando mis padres llegaron por primera vez, y a pesar de ser extranjeros, fueron cálidamente invitados a celebrar con las familias locales".La pareja se integró rápidamente en la comunidad, aprendiendo de los locales y contribuyendo al intercambio cultural. El padre de JongMay, Tim Urbonya, interpretó a Edgar Snow en una serie de televisión de 1994 adaptada del libro Red Star Over China, donde visitó lugares revolucionarios como Yan'an."Mi papá siempre me dijo que esos años en Dalian fueron algunos de los más transformadores de su vida", reflexionó JongMay. Inspirado por estas experiencias, escribió una canción titulada "I Am Chinese" (Soy chino), celebrando las ciudades a las que habían viajado y su profunda conexión con el país.El vínculo de la familia con Dalian era tan profundo que le dieron a la hermana mayor de JongMay el nombre chino "Dalian" en honor a la ciudad y a su gente, mientras que JongMay representa la pronunciación china de "China" y "América"."El amor de mis padres por China moldeó el ambiente en el que crecí", dijo JongMay. "Incluso después de que regresamos a los Estados Unidos cuando yo tenía seis años, su aprecio por las tradiciones chinas continuó influyendo en mí".JongMay recordó las tardes de su infancia viendo dramas y películas históricas chinas con sus padres. "No entendía mucho chino en ese entonces, pero las historias y los escenarios históricos me cautivaron", dijo. Sus padres también la animaron a aprender mandarín y a conectarse con amigos chinos.Esta educación despertó la curiosidad de JongMay por sus raíces chinas, lo que finalmente la llevó de regreso al país."Quería experimentar China con mis propios ojos", dijo JongMay, quien domina el mandarín. "Mis padres me enseñaron a abrazar la curiosidad y el intercambio cultural, y espero continuar con ese legado".Cuando JongMay Urbonya llegó a Beijing durante la preparatoria y más tarde la universidad, especializándose en danza china, el país estaba experimentando un renacimiento de las antiguas tradiciones, con las generaciones más jóvenes abrazando su herencia de manera moderna.Desde el creciente interés por el Hanfu hasta el resurgimiento de las artes clásicas chinas, como la caligrafía y la poesía, el renacimiento proporcionó a JongMay el entorno perfecto para profundizar su conexión con China.A lo largo de los años, su pasión por el Hanfu, la poesía clásica y la caligrafía se convirtió en una carrera vibrante. En la actualidad, crea contenidos en plataformas como TikTok, Bilibili y Xiaohongshu, mostrando diferentes facetas de la cultura china a una audiencia global."Hanfu refleja la rica historia y artesanía de China", dijo. "Es una forma de conectar con el pasado mientras que se inspira el presente".El espíritu creativo de su padre y la filosofía de intercambio cultural de sus padres inspiran su trabajo actual. Desde la mezcla de artesanías tradicionales chinas en contextos modernos hasta la exhibición de dialectos y mercados locales, JongMay continúa promoviendo el entendimiento entre culturas."Las historias de mis padres sobre la vida en China durante la década de 1990, cuando la vida material era menos abundante pero las conexiones humanas eran ricas y genuinas, resuenan profundamente en mí", dijo. "Veo sus valores en todo lo que hago"."Quiero usar mis experiencias para construir puentes significativos", dijo. "A través del Hanfu y otras tradiciones, he aprendido que abrazar diferentes culturas nos hace a todos más ricos".RRR