Los cuatro países que dan la nacionalidad al comprar una propiedad

En un mundo cada vez más globalizado, la posibilidad de obtener una nueva nacionalidad distinta de la del país de origen se ha convertido una alternativa relativamente sencilla para aquellos que cuentan con los medios necesarios. Los conocidos como "programas de ciudadanía por inversión", están ganando popularidad, sobre todo a la hora de atraer a inversores internacionales, empresarios y familias que buscan diversificar sus opciones de residencia, garantizar un futuro más estable o acceder a mejores oportunidades de negocio.

No obstante, la tendencia de "comprar" una nacionalidad al adquirir propiedades no solo ha transformado el panorama inmobiliario en determinados países, sino que también ha abierto un debate sobre la ética y las consecuencias económicas de estas políticas. Para muchos, estos programas representan una puerta de entrada a una vida más libre, con menos restricciones de viaje y un mayor acceso a mercados internacionales. Sin embargo, para otros, son una estrategia que privilegia a los más adinerados y podría acrecentar la desigualdad en los países que los ofrecen.

A pesar de las críticas, el interés por este tipo de iniciativas sigue en auge. Personas de todas partes del mundo ven en estos programas una solución rápida y eficiente para sortear las limitaciones que imponen las políticas migratorias tradicionales. A continuación detallamos algunos de los países que ofrecen esta posibilidad.

1. Grecia

Grecia es uno de los países europeos que ha optado por mantener su programa 'Golden Visa', por la cual los inversores y sus familias podrán obtener un permiso de residencia durante cinco años que les permita viajar por toda Europa, a cambio de invertir un mínimo 250.000 euros, cuando se trate de convertir en propiedades comerciales en lugares habitables o reparar algunos inmuebles.

Esta también se aplica a la hora de adquirir una propiedad inmobiliaria, aunque deberá ser de al menos 120 metros cuadrados, y la inversión será de un mínimo 800.000 euros o 400.000 euros en función de la zona. Tras vivir durante siete años en el país, y pagar los impuestos, los inversores pueden solicitar la ciudadanía.

2. Turquía

Turquía es otro de los países que ofrece estos programas. En su caso, el requisito mínimo de inversión en un inmueble es de 400.000 dólares, y entre 4 y 6 meses podrían obtener el pasaporte turco, que permite la entrada sin visado a cerca de 137 países. Al igual que en Grecia, tanto los cónyuges, como los hijos menos de 18 años, se pueden beneficiar de este programa, y no existen requisitos mínimos de estancia física para tramitar la solicitud.

3. Malta

El caso del archipiélago de Malta es algo más complejo. Su Programa de Inversores individuales (IIP) exige la inversión inmobiliaria de al menos 350.000 dólares, aunque también contempla una contribución al Fondo Nacional de Desarrollo y Social del país de 650.000 dólares, así como el compromiso residir en las islas durante un año, y proporcionar evidencia de esto. De igual manera, la familia también se puede beneficiar del programa.

4. Antigua y Barbuda

Antigua y Barbuda, una de las islas del Caribe, caracterizada por su clima y paisaje tropical, también se encuentra dentro de este programa. La inversión en este caso es de 300.000 dólares en bienes inmuebles, aunque de igual manera, se puede hacer una donación única de 230.000 dólares al Fondo Nacional de Desarrollo. A partir de entonces, el periodo para tramitar la nacionalidad oscila entre los 6 y 12 meses, y una vez obtenido el pasaporte, permite viajar hasta a 162 países sin visado.