El derecho a saber sobre el monto que recibieron de finiquito Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo Ponce de León como titulares de la desaparecida Secretaría de Programación y Presupuesto (SPP) fue eliminado en el sexenio de Enrique Peña Nieto. El 8 de julio de 2014, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en ese entonces encabezada por Luis Videgaray Caso, solicitó al Archivo General de la Nación (AGN) la destrucción de 29.6 toneladas de documentos de la extinta dependencia de la que salieron los tres primeros presidentes de la etapa neoliberal.En esa montaña de papeles en original y copia, que abarcaban documentación de la SPP de 1982 a 1992, estaba la información sobre los cheques que otorgó el Estado a Salinas de Gortari y a Ernesto Zedillo cuando se desempeñaron como secretarios de aquella dependencia. En ambos casos, la Secretaría de Hacienda señaló en las respuestas a las solicitudes de información que los datos solicitados corresponden a los ejercicios 1982 y 1987, en el caso de Salinas, y 1988 a 1992, en el caso de Zedillo. Y añadió: “No se cuenta con la información en virtud de que la documentación administrativa y legal en original y copia de los años 1960, 1973, 1974, 1979 y 1982 a 2009, causó baja al cumplir su vigencia documental, de conformidad con el Acta de Baja Documental Número 410”. En el considerando segundo de dicha Acta de Baja Documental, que corresponde a la Dirección del Sistema Nacional de Archivos del AGN, se señala que “las series documentales analizadas no merecen ser incorporadas al acervo de la Unidad de Archivo Histórico de la dependencia o del Archivo General de la Nación, ni ameritan ser reproducidas en otro tipo de soporte antes de efectuar la baja”. Carlos Salinasse quejó hace unas semanas de que “alguien” le había retirado su pensión como ex presidente y que estaba “desempleado”. Ernesto Zedillo, en cambio, goza de una pensión mensual vitalicia de más 136 mil pesos por parte del Banco de México. La Secretaría de Programación y Presupuesto fue creada en 1976 en el gobierno de José López Portillo. En 1992, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari decretó su extinción y resolvió otorgar todas sus atribuciones a la Secretaría de Hacienda. Fue catalogada como la “jefatura de gabinete” del gobierno en turno.A los 23 días de la solicitud de la Secretaría de Hacienda, es decir, el 31 de julio de 2014, el Archivo General de la Nación autorizó la “baja como patrimonio nacional de dicha documentación”. En ese tiempo el AGN todavía estaba sectorizado a la Secretaría de Gobernación, que presidía Miguel Ángel Osorio Chong. “Los archivos son un componente indispensable de la democracia. No puede haber Estado ni nación si no hay memoria histórica”, comentó Osorio Chong en noviembre de 2017, tres años y medio después de la destrucción de estos documentos.Desde antes de ese año Felipe Calderón ya había prescindido de la pensión de retiropara los ex presidentes –en realidad pidió que se le transfiriera a la organización Aquí Nadie se Rinde–, decisión que antes que él tomaron Ernesto Zedillo y Carlos Salinas, quienes también renunciaron a los montos millonarios mensuales que se les otorgaba por ese concepto.¿Quienes no revelaron sus liquidaciones?MILENIO formuló distintas solicitudes de información a las secretarías, organismos y gobiernos estatales para conocer los montos de liquidación y posibles pensiones que recibieron los presidentes de México de 1988 a 2024 en los cargos que ocuparon, previo a ser investidos como titulares del Poder Ejecutivo federal. Sólo hay dos casos donde el sujeto obligado accedió a revelar los montos de liquidación, pero no pensión: Vicente Fox Quesada, por su gestión como gobernador de Guanajuato de 1995 a 1999, y Felipe Calderón Hinojosa, en su breve paso como director general de Banobras, del 12 de febrero al 2 de septiembre de 2003. Este diario también realizó una solicitud de información a la Oficialía Mayor del Gobierno del Estado de México sobre los finiquitos que obtuvoEnrique Peña Nieto como secretario de Finanzas del gobierno mexiquense (2000-2002) y como gobernador de esa entidad (2005-2011), cargos que desempeñó antes de ser presidente de México de 2012 a 2018. Hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta. El gobierno de Guanajuato, en cambio, a través de la Secretaría de Finanzas estatal, indicó que Fox Quesada recibió un monto de 80 mil 678 pesos netos por concepto de “baja del cargo como gobernador, por concepto de pagos proporcionales de aguinaldo, vacaciones y prima vacacional del ejercicio 2009”, según la respuesta a la solicitud de información con el folio 61161. Meses antes del inicio de las campañas presidenciales de este año, Vicente Fox celebró la designación de Xóchitl Gálvez como candidata del frente opositor integrado por PAN, PRI y PRD. En entrevistas y a través de sus redes sociales, el guanajuatense pidió a Gálvez Ruiz restituir las onerosas pensiones de los ex presidentes y eliminar los programas sociales implementados en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.Felipe de Jesús Calderón Hinojosa recibió la cantidad neta de 128 mil 519 pesos en su gestión de nueve meses como director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos, de acuerdo con la respuesta a la solicitud de información con el folio 237-24, que está firmada por el director de Recursos Humanos del organismo, Alfredo Vargas San Vicente. En julio de 2022, López Obrador presentó en su conferencia ‘mañanera’ en Palacio Nacional una gráfica comparativa de las pensiones que recibían los ex presidentes de México y de las que gozan los ex mandatarios de otras naciones. En estas tablas el tabasqueño expuso que Felipe Calderón Hinojosa era el ex presidente que contaba con una de las jubilaciones más altas del mundo. Detalló que el michoacano, hoy en un autoexilio en España, era el “número uno” de los ex mandatarios con jubilaciones vitalicias millonarias, con una pensión anual de 54.2 millones de pesos. Es decir –dijo López Obrador– “la mitad de lo que recibía el ex presidente de Estados Unidos, George W. Bush, quien percibía 22 millones 847 mil 184 pesos”. De acuerdo con los datos revelados por el entonces Presidente en aquella conferencia, Vicente Fox llegó a recibir hasta 48.9 millones de pesos al año de pensión antes del decreto de diciembre de 2018 que eliminó esas jubilaciones doradas a los ex mandatarios. La pensión de Carlos Salinas era de 42.8 millones de pesos anuales. Ernesto Zedillocontaba con una jubilación de 37.8 millones de pesos y Luis Echeverría –quien falleció en julio de 2022– gozaba de una pensión de 44 millones de pesos al año.La información pública de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) establece que los ex presidentes recibían entre 3 y 4.5 millones de pesos al mes, antes de la reforma de López Obrador.Los finiquitos de Salinas y Zedillo como secretarios de Programación y Presupuesto, sin embargo, quedarán registrados como parte de la historia oculta de la transparencia gubernamental.
