Material. Un vistazo a la revolución del arte en México

La Semana del Arte, un año más, trae consigo a visitantes de todo el mundo que llenan las galerías, los restaurantes, y las calles de Ciudad de México. Este evento atrae tanto a coleccionistas, curadores y críticos internacionales como a un público local ávido de descubrir nuevas propuestas. En este contexto, Material emerge como una bocanada de aire fresco, un espacio que desafía las convenciones y redibuja las fronteras de lo que una feria puede ser. Desde su nacimiento en 2014, este proyecto ha sido un punto de encuentro para artistas, galeristas y público con un interés genuino en lo experimental, lo emergente y lo inesperado.Fundada con la intención de dar visibilidad a iniciativas independientes y de nutrir una comunidad horizontal y vibrante, Material se ha consolidado como una pieza clave dentro de la Semana del Arte en México. Con una fuerte presencia de galerías latinoamericanas, un programa público que incluye performances inéditos y un compromiso con las propuestas jóvenes de todo el país, promete este año ser un epicentro de energía creativa.Marcos Ruiz, fundador y director de programación de Material, nos habla de la próxima edición y sobre la relevancia de tener proyectos como este en la ciudad. ¿Cómo describirías la esencia de la feria?Material siempre ha sido un proyecto que trasciende el formato tradicional de una feria de arte. Desde el principio, nuestra intención ha sido crear un espacio fresco y accesible que privilegie el diálogo y la calidad. Para mí, la esencia reside en su capacidad para generar conexiones genuinas entre galerías, artistas, coleccionistas y el público en general. Es un lugar donde se descubre lo nuevo, se despiertan emociones y se construye una comunidad que valora lo experimental y lo innovador.¿Cómo surgió y qué propósito los motivó a fundarla?Material nació en 2014 con la idea de crear un espacio que capturara la energía vibrante de la escena artística de México y el mundo. Nuestro objetivo era dar visibilidad a galerías, colectivos y proyectos independientes que no encontraban cabida en las ferias más grandes. Desde el principio, nuestra intención fue fomentar una comunidad más horizontal, donde todos pudieran conectarse de manera directa y genuina. Aunque el proyecto ha crecido con los años, ha mantenido intacta su esencia: explorar nuevas formas de relacionarnos con el arte contemporáneo.¿Qué papel juega esta feria dentro de la Semana del Arte?Creo que es un espacio más accesible, menos rígido, enfocado en propuestas que muchas veces no tienen cabida en otros eventos. Es el lugar donde se gestan conversaciones importantes sobre el futuro del arte contemporáneo y donde el público puede tener una experiencia mucho más cercana con las obras y las personas detrás de ellas. En ese sentido, complementa perfectamente la oferta de la semana y añade una energía distinta.¿Podrías darnos un adelanto sobre esta edición?Este año estoy especialmente emocionado porque contamos con una gran selección de galerías de toda Latinoamérica. Es algo que refleja la energía que está surgiendo en la región, y creo que el público lo va a disfrutar muchísimo. Además, el programa público estará increíble, con pláticas y performances.Otra sección que no se pueden perder es el espacio de proyectos. Aquí damos visibilidad a espacios jóvenes de toda la República Mexicana, ofreciéndoles mentoría y un espacio gratuito dentro de la feria y en todos nuestros eventos durante dos años. Es una forma de apoyar el crecimiento de estas iniciativas y de enriquecer aún más la diversidad de propuestas que ofrecemos en Material.¿Qué hace que 'Material' sea una visita imprescindible?Tiene esa energía especial que no encuentras en otros eventos: es cercano, accesible y lleno de propuestas emocionantes. Ya sea que vengas a explorar las galerías, a participar en las charlas, a disfrutar de un performance, siempre encontrarás algo que te inspire. Es un espacio que invita a vivir el arte de manera diferente, y creo que esa es una de las razones por las que nadie debería perdérselo.