Protestan en Sonora para exigir que aparezca Lamberto Quijada; autoridades lo ligan con La Línea
Lamberto Quijada fue privado de la libertad en Sonora el pasado 5 de enero, y desde entonces se desconoce su paradero, por lo que este martes se llevó a cabo una protesta para exigir su aparición.
Familiares y amigos de Lamberto Quijada tomaron las calles de Hermosillo para exigirle a las autoridades información sobre el paradero del desaparecido, no obstante, fuentes consultadas por El Financiero afirmaron que el sujeto pertenece al crimen organizado.
Autoridades del Gobierno de Sonora, que prefirieron mantener el anonimato, indicaron que Lamberto es primo de Javier Quijada, quien era conocido como ‘El Pancholín’, quien fue asesinado en septiembre de 2024 en Guadalajara.
El desaparecido también es tío de Manuel Quijada, sobre quien pesa una orden de aprehensión por homicidio y presuntamente tiene nexos con un grupo delictivo que opera en Tepoca y Yécora, el cual se presume es La Línea.
Sumando a los nexos anteriores con el narcotráfico, Lamberto Quijada es sobrino de Francisco Quijada Molina, padre de otra persona que también fue asesinada el pasado 17 de diciembre en Tecoripa.
Según los datos de las autoridades de seguridad y confirmados para El Financiero, Lamberto Quijada ha cometido varios delitos, aparte de la delincuencia organizada como estupro, violencia familiar y robo de vehículos.
Los agentes de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), que prefirieron mantener el anonimato, señalaron que la desaparición de Lamberto se debe a una venganza entre familiares del músico conocido como ‘El Pancholín’.
Ante la situación, autoridades de seguridad confirmaron que ‘El Pancholín’ pertenecía al Cártel de Juárez, mientras que Lamberto Quijada era integrante de La Línea, brazo armado de dicho cártel que opera en el noroeste de Sonora.
Los agentes de la AMIC refirieron, además, que un mensaje anónimo advirtió que la paralización de la ciudad a través de marchas es “solo la punta del iceberg” y que se está amenazando de muerte a “hombres, mujeres y niños” del pueblo de Tepoca.