‘Venezuela le ganó al imperialismo y a su diplomacia de engaño’, dice Maduro en cuestionada juramentación
Este viernes 10 de enero, Nicolás Maduro asumió oficialmente su tercer mandato consecutivo como presidente de Venezuela, en un acto celebrado en la Asamblea Nacional de Caracas. Durante su discurso de juramentación, Maduro declaró que “Venezuela le ganó al imperialismo y a su diplomacia de engaño”, destacando lo que denominó como una victoria histórica frente a los intentos internacionales de deslegitimar su gobierno.
En su intervención, Maduro señaló que su liderazgo no proviene de ninguna potencia extranjera ni de las oligarquías, sino de “la fuerza histórica del pueblo venezolano”. Además, reiteró su compromiso con los valores bolivarianos y su lealtad al legado del expresidente Hugo Chávez.
“La banda presidencial que hoy llevo fue hecha por las manos de las mujeres humildes de los barrios de Caracas, con el sudor del pueblo. Es un símbolo de resistencia y de victoria”, afirmó Maduro. El mandatario hizo énfasis en que su poder emana de la Constitución y de la historia del país, aludiendo al compromiso que dice tener con los sectores más vulnerables de la sociedad venezolana.
Juramentación bajo tensiones políticas
El evento ocurre en medio de una fuerte polarización tanto dentro como fuera del país. Desde las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, la oposición, encabezada por Edmundo González Urrutia, ha denunciado fraude electoral, alegando que González obtuvo el 70% de los votos. En contraste, el Consejo Nacional Electoral proclamó a Maduro como vencedor, lo que generó rechazo por parte de múltiples países democráticos y organismos internacionales.
El jueves previo a la juramentación, Caracas fue escenario de masivas protestas lideradas por la dirigente opositora María Corina Machado, quien reapareció tras meses en la clandestinidad. Durante su intervención en Chacao, Machado instó a los venezolanos a mantener la lucha contra lo que calificó como un “golpe de Estado”. Las manifestaciones fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad, resultando en detenciones arbitrarias y enfrentamientos con simpatizantes del oficialismo.
Machado fue retenida brevemente tras la protesta, un hecho que su equipo calificó como un intento de intimidación. “Nadie podrá detener la lucha del pueblo venezolano por la democracia”, afirmó Machado tras su liberación.
Reacciones internacionales
El acto de juramentación ha polarizado aún más la opinión global. Países como Estados Unidos, Canadá, y varias democracias latinoamericanas, incluyendo Argentina y Uruguay, han reconocido a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela. Por su parte, naciones como China, Rusia, Cuba e Irán respaldan a Maduro, aceptando los resultados oficiales del CNE.
Maduro aprovechó la ocasión para criticar a Estados Unidos, a quien acusa de liderar una conspiración internacional en su contra. “El pueblo de Venezuela venció al imperialismo. Ni ellos ni nadie podrán con nosotros”, aseveró.
Protestas y un país dividido
Mientras Maduro realizaba su juramento, miles de venezolanos continuaban movilizándose en rechazo a su presidencia. Las calles de Caracas se llenaron de pancartas y consignas que denunciaban el fraude electoral y exigían un cambio político inmediato.
El tercer mandato de Nicolás Maduro, que se extenderá hasta 2031, inicia en medio de un panorama de tensiones políticas internas, sanciones internacionales y una crisis económica que sigue afectando a millones de venezolanos. La polarización y las denuncias de ilegitimidad hacen prever que los próximos años estarán marcados por una confrontación constante entre el oficialismo y la oposición.
Maduro concluyó su discurso asegurando: “Este no es un gobierno de apellidos, es un gobierno del pueblo y para el pueblo. Seguiremos garantizando la paz y la soberanía nacional”. Resta por ver si estas palabras logran calmar el clima de incertidumbre que atraviesa Venezuela o si, por el contrario, profundizan las divisiones existentes en el país.