Las rebajas de enero ya han arrancado. Desde el día 7 de este mes y hasta finales de febrero, miles de comercios ofrecen descuentos que atraen a consumidores de toda España. Sin embargo, junto con las oportunidades llegan también posibles malentendidos o abusos que los compradores deben conocer para protegerse. La Policía Nacional ha utilizado sus redes sociales para alertar sobre prácticas comunes durante esta temporada. En un vídeo que ya acumula miles de reproducciones en TikTok, han lanzado el siguiente mensaje: «Los derechos no se rebajan en las rebajas». Con esta advertencia, recuerdan a los consumidores que deben estar informados sobre lo que pueden exigir y que las promociones, aunque atractivas, no justifican vulnerar las leyes de consumo. Entre las claves que destacan, está la obligación de los comercios de aplicar descuentos a al menos el 50% de los productos si anuncian rebajas. Este punto asegura que los clientes encuentren auténticas ofertas, evitando campañas que solo sirvan como reclamo engañoso. Además, explican que cualquier artículo defectuoso debe ser reemplazado o reembolsado, sin importar que esté rebajado, siempre que se conserve el ticket de compra. Otro aspecto importante es el precio de los productos en oferta. La ley exige que el precio rebajado sea el más bajo que se haya registrado en los 30 días anteriores. Esto significa que las tiendas no pueden inflar precios antes de aplicar los descuentos para hacerlos parecer mayores. Por tanto, es aconsejable que los consumidores revisen precios con antelación para evitar caer en estas estrategias. En cuanto a las devoluciones, la Policía advierte de que algunas tiendas pueden intentar negarlas durante el periodo de rebajas. Sin embargo, recuerdan que esta práctica es ilegal si el producto tiene algún defecto. Por eso, conservar el justificante de compra es imprescindible para ejercer el derecho a una devolución o cambio. Finalmente, en relación con los métodos de pago, aclaran que los establecimientos no están obligados a aceptar tarjetas, aunque muchas tiendas lo hacen. Si permiten este método, pueden establecer un gasto mínimo para su uso, algo que no siempre es del agrado de los clientes. Por este motivo, es recomendable llevar efectivo como alternativa para evitar problemas en las cajas.
