A pesar de que ya disputó sus primeros minutos con la camiseta sevillista frente al Valencia, Rubén Vargas ya es nuevo futbolista nervionense después de que haya sido presentado ante los medios este martes. Arropado por el director deportivo del Sevilla, Víctor Orta, Vargas ya comenta cuáles fueron sus sensaciones cuando llegó, y sobre todo qué objetivos se marca a nivel colectivo e individual en Nervión. «Los primeros días fueron muy bien. Sentí un buen feeling con los compañeros y la afición, y con Víctor (Orta) . No necesité mucho para decirle a mi agente que quería ir al Sevilla», fueron las primeras palabras del internacional suizo, que ya sabe lo que es vivir el ambiente del Ramón Sánchez-Pizjuán pese a las horas bajas que vive el grupo que dirige García Pimienta. «Es muy especial estar aquí. Y cuando hicimos el 1-1 me encantó la reacción. Cuando marcamos la grada se puso muy ruidosa y eso me gusta. El objetivo es que estemos así todos los partidos en casa para que demos lo mejor de nosotros. Quiero ganar con este equipo todos los partidos. Es importante que estemos positivos de cara al próximo partido», refería el extremo en un castellano muy trabajado. Abundaba el refuerzo sevillista acerca de cuáles son sus virtudes como profesional: «Soy un jugador ofensivo que también puede defender. Tengo experiencia en la Bundesliga . Me siento bien de estar en LaLiga ahora, estoy muy feliz aquí y en un equipo que le gusta tratar bien el balón, creo que cada día me siento mejor». Cuestionado por cómo habían sido las negociaciones previas, le salió un nombre que conoce bien en la plantilla sevillista el propio Vargas al proceder del mismo país, el helvético: «Hablo mucho con Djibril (Sow) . Él me escribió cuando escuchó que podía venir, me escribió y yo le llamé. Él pensó que era un buen sitio para mí, para ayudar al equipo, y creo que eso es muy positivo».
