El pasado fin de semana llegaban 360 inmigrantes a Málaga, en avión y procedentes de Canarias, todos ellos irregulares. La Junta de Andalucía acusaba al Gobierno de España de proceder con opacidad al respecto y no seguir los protocolos adecuados. En el caso de Córdoba, durante el año pasado se recibieron varios contingentes de inmigrantes desde las islas acogidos por la Cruz Roja . El mismo proceder que denuncia la Junta ha podido ser comprobado de forma fehaciente por este periódico, que ha requerido información sobre si se ha procedido a algún traslado más a la capital, sin resultado. En principio, y ante la posibilidad de contar con partidas de personas procedentes de este arribo masivo, parecen mantenerse los grupos ya recalados previamente. ABC Córdoba solicitó ayer información a la Subdelegación del Gobierno sobre el número de inmigrantes existente en la ciudad o provincia y la posibilidad de que se distribuyesen en diversos puntos personas procedentes de la llegada a Málaga. La respuesta remitía al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones , y también a las onegés que se hacen cargo de estas personas, que en el caso de la capital es fundamentalmente Cruz Roja. La propia Cruz Roja remitía a su vez a Subdelegación de Gobierno, y el Ministerio ha dado la callada por respuesta, por lo que la sintonía con lo manifestado por la Junta parece ser cierta. Así las cosas, se puede ver a un grupo numeroso de inmigrantes en uno de los hoteles adecuados en la capital para ello, a casi siete kilómetros de la ciudad. Una parte se encuentra charlando en el exterior, otros realizan ya labores de mantenimiento en el propio hotel, y también los hay sentados en la cafetería o deambulando tranquilamente. Proceden de la última llegada de unas 110 personas a Córdoba el pasado febrero de 2024. La mayoría son hombres de Mali , de religión musulmana, «aunque hay algún católico», detallaron fuentes de la Cruz Roja. La conocida organización humanitaria acompaña en todo momento a estas personas, que cuentan con alojamiento y comida , además de clases de español. Esta misma fuente explicó a ABC que los agrupan de forma lo más homogénea posible. Por eso a este hotel han llegado sólo hombres jóvenes , sin mujeres ni menores, del mismo país y religión similar. Huyen de la guerra iniciada en 2012 , cuando tuaregs y grupos yihadistas se alzaron en el norte de esta nación. De los dos tipos de asilo existentes en España, el asilo propiamente dicho o estatuto de refugiado y la protección subsidiaria , estos malienses se acogen al último. Se otorga a aquellos que no cumplen con los requisitos para ser reconocidos como refugiados pero que si regresasen a su país de origen podrían enfrentarse a un riesgo real de sufrir daños graves, como la pena de muerte, tortura o violencia indiscriminada en situaciones de conflicto interno o internacional. «Deben de estar aquí al menos seis meses antes de trabajar legalmente», como expuso la fuente consultada. A partir de ahí, los jóvenes malienses irán escogiendo labores del campo en su mayoría, por lo que van abandonando el hotel. Lo que los españoles rechazan por las condiciones laborales «a ellos les sirve para mandar dinero a su casa». El director de este hotel comentó que posiblemente el grupo de Málaga se dirija en gran medida a Almería , cuestión aún por confirmar. En otro de los hoteles de acogida en Córdoba no se percibía ni movimiento ni presencia de la Cruz Roja.