Un nuevo informe del
Royal Automobile Club (RAC) pone de manifiesto una tendencia alarmante en el Reino Unido, pero extrapolable al resto del continente europeo: el exceso de velocidad se ha convertido en una práctica habitual para la mayoría de los conductores del país. Según los datos recopilados,
ocho de cada diez usuarios de la vía pública afirman haber presenciado a
otros conductores excediendo los límites de velocidad en todo tipo de carreteras. En particular, el 82% destaca haber presenciado este comportamiento en autopistas y otras vías de alta velocidad, mientras que el 80% señala que este hecho también ocurre en calles con límites de
30 y 20 millas por hora (50 y 30 km/h). Este último dato es el que más preocupa a las autoridades, debido al mayor riesgo para usuarios vulnerables como peatones y ciclistas.
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