El pueblo de España que tiene casi más piscinas que habitantes
Aunque el invierno está en su punto más álgido, en Illana, un pequeño municipio de Guadalajara, ya se empieza a pensar en la llegada del buen tiempo y en la puesta a punto de sus piscinas. Y no es para menos, ya que esta localidad de La Alcarria ostenta el récord de concentración de piscinas por habitante en España. Con una población de 919 personas y 734 piscinas registradas, la proporción es casi de una piscina por residente.
Illana se encuentra situada entre Guadalajara, Madrid y Cuenca, lo que la convierte en un lugar atractivo para quienes buscan una segunda residencia lejos del bullicio de la capital. Muchas de estas piscinas no están en el núcleo urbano del pueblo, sino en urbanizaciones cercanas como El Soto, Riollano y El Cuartillejo, que fueron concebidas en la década de 1970 con grandes expectativas de crecimiento.
Sin embargo, la realidad actual dista mucho de aquellos planes iniciales. Aunque originalmente se parcelaron 990 terrenos, en la actualidad muchas de estas parcelas permanecen vacías y varias piscinas se encuentran en desuso. La falta de población residente ha llevado a que gran parte de estas infraestructuras no reciban el mantenimiento adecuado durante la temporada invernal.
El alcalde de Illana, Francisco Javier Pérez del Saz, ha explicado que el municipio cuenta con una población flotante, ya que muchas personas utilizan estas viviendas como segunda residencia. "Unos se empadronan, otros se dan de baja tras varios años. Es cierto que mantenemos la población gracias a las urbanizaciones", señala.
La mayoría de los propietarios de estas viviendas residen habitualmente en Madrid, situada a apenas cien kilómetros de distancia. En el casco urbano de Illana, sin embargo, las piscinas son escasas y solo unas pocas se encuentran operativas incluso en verano.
Illana no es el único municipio español con una alta densidad de piscinas. Localidades como El Casar de Escalona en Toledo o Torres-Torres en Valencia también presentan cifras elevadas. No obstante, la singularidad de Illana es su baja densidad poblacional en comparación con la cantidad de estas instalaciones, convirtiéndolo en un caso llamativo en España.