México rechaza aterrizaje de avión militar de Estados Unidos con migrantes deportados por Trump
Un avión militar estadounidense con migrantes deportados nunca despegó con rumbo a México debido a que las autoridades mexicanas negaron el acceso al vuelo. Según un informe de NBC News, el vuelo formaba parte de una operación más amplia de deportaciones masivas realizadas por Estados Unidos, en la que otros dos aviones con destino a Guatemala sí lograron despegar el jueves 23 de enero.
El avión en cuestión iba a salir desde Biggs Army Air Field, ubicado en Texas, y estaba programado para trasladar a personas deportadas desde Estados Unidos hacia territorio mexicano. Sin embargo, la negativa de México para permitir el aterrizaje del avión militar refleja las crecientes tensiones entre ambas naciones, especialmente tras las declaraciones de emergencia nacional en la frontera por parte de Donald Trump y su política migratoria más estricta.
¿Por qué México rechazó el avión con migrantes deportados de Estados Unidos?
De acuerdo con el informe, la negativa de México a aceptar el aterrizaje del avión militar estadounidense responde a cuestiones relacionadas con la soberanía nacional. Este rechazo ocurre en un contexto de tensiones políticas entre ambos países, agudizadas por las recientes órdenes ejecutivas de Trump que endurecen las políticas de deportación y designan a los cárteles mexicanos como grupos terroristas.
En conferencia de prensa, Claudia Sheinbaum, presidenta de México, señaló que las acciones de su gobierno priorizan la defensa de la soberanía nacional. “Ellos pueden actuar en su territorio, nosotros lo que decimos es la defensa de nuestra soberanía e independencia”, declaró el martes 21 de enero. La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México aún no ha emitido un posicionamiento oficial sobre el incidente, pero afirmó que están trabajando en un comunicado.
Mientras tanto, los vuelos hacia Guatemala, que partieron el mismo día, transportaron entre 75 y 80 personas cada uno. Estas operaciones forman parte de un plan del gobierno estadounidense para incrementar las deportaciones masivas en los primeros días del segundo mandato de Donald Trump, lo que ha generado fricciones diplomáticas con países receptores como México.
Origen de las deportaciones masivas en EE. UU.
Las deportaciones masivas implementadas por el gobierno de Trump no son un fenómeno nuevo, pero han cobrado un ritmo más acelerado desde que asumió su segundo mandato. Apenas cuatro días después de su investidura, Trump ordenó una serie de operativos que resultaron en la detención de 538 migrantes en distintos estados, según informó Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca.
Estas acciones se realizan bajo el amparo de la emergencia nacional declarada en la frontera con México, una medida que busca reforzar la seguridad fronteriza y endurecer las medidas contra la inmigración ilegal. Además, Trump ha reiterado su intención de devolver a los migrantes a sus países de origen lo más rápido posible, incluso utilizando aviones militares para agilizar el proceso.
El uso de estos aviones ha generado controversia debido al mensaje político que envían. Para los gobiernos de los países receptores, como México, aceptar estos vuelos puede interpretarse como una vulneración de su autonomía. La negativa reciente de México no solo es una respuesta a la política migratoria de Trump, sino también una declaración de independencia frente a la presión diplomática de Estados Unidos.