El anuncio del consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública, José Antonio Nieto , esta pasada semana sobre uno de los aspectos más controvertidos de la Ley de Eficiencia en la Justicia 1/25 que amplía las competencias de los Juzgados de Violencia sobre la Mujer ha levantado la polémica. Nieto aseguraba que este aumento de competencias a priori no debe ser «una mala solución» dentro de la reforma que conllevará la aplicación de la nueva Ley Orgánica , pero ello, ya señalaba que también «exige una reordenación de servicios » apuntando a la posibilidad de convertir un juzgado de Instrucción en uno de Violencia. El responsable de Justicia en Andalucía explicaba que «esta ley, que es una ley esperada por muchos, ha tenido el voto en contra del Partido Popular en parte» por la sobrecarga y colapso que algunos juristas pronostican para los juzgados de Violencia sobre la Mujer, y ello porque «la ley lo recoge mal», apostilla. El caso es que el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Córdoba ya ha denunciado ante el TSJA y al propio CGPJ que sin asumir más competencias nuevas ya está colapsado. Con una decena de funcionarios , un letrado, un fiscal atienden un mínimo de seis guardias por casos de maltrato al día -muchos más si es después del fin de semana- a lo que hay que sumar los asuntos civiles (que emanan de estas causas) como divorcios o medidas cautelares con menores. El titular del Juzgado de Instrucción 5 de Córdoba, Luis Rabasa, exdecano de los jueces, ha lamentado que este órgano instructor al asumir las competencias de impago de pensiones o delitos sexuales cualquiera que haya sido el autor es incapaz de asumir ese incremento de asuntos. «Se hablaba de que había que crear otro Juzgado de Violencia Sobre la Mujer, es posible que reconviertan uno de Instrucción de los nuestros y nos quedaríamos con 7 juzgados de Instrucción que serían insuficientes para el Juzgado de Guardia 24 horas». Por su parte, el secretario coordinador de Justicia, Juan Antonio Guerra, asegura que suprimir un Juzgado de Instrucción y por tanto perder el Juzgado de Guardia 24 horas por el que tanto se ha luchado durante años sería ir para atrás. Como solución que se ha planteado a la Junta de Andalucía es la de crear dentro del nuevo sistema organizativo de Tribunales de Instancia «una unidad de Violencia o también, como permite la Ley, acudir a ese aspecto de la comarcalización de partidos judiciales». En este sentido, el representante de los Letrados de la Administración de Justicia asegura que «no es necesario crear un juzgado entero de Violencia sobre la Mujer, que sería lo apropiado, pero no lo ha aprobado el Ministerio; sino aprovechando este nuevo sistema de reorganización de la Justicia crear la plaza de magistrado y cuatro o cinco funcionarios en lugar de ocho que son los que habitualmente tiene un juzgado entero». Desde los sindicatos CSIF y USO han mostrado a ABC su oposición a la supresión de un Juzgado de Instrucción al considerar que sería un paso atrás en el Servicio Público de Justicia y provocaría a su vez mayor trabajo al Juzgado de Violencia ya que las guardias las hace en el 24 horas liberando al juzgado.