Los contratos "a dedo" en obra pública e ingeniería se disparan un 142% en sólo dos años
La patronal de la construcción (CNC) ha vuelto a poner hoy el foco en el uso cada vez más extendido de los denominados medios propios por parte de las administraciones públicas para ejecutar proyectos de obra pública e ingeniera.
Según los datos recopilados por CNC, los encargos de las administraciones a medios propios han disparado su importe un 142%, desde los 1.628 millones de euros en 2021 hasta los casi 4.000 millones en 2023. También ha crecido un 95% el número de encargos en ese periodo, de 1.888 a 3.689; tal y como se desprende de fuentes como OIReScon, la Oficina Independiente de Regulación y Supervisión de la Contratación dependiente del Ministerio de Hacienda.
Los encargos a medios propios son protagonizados fundamentalmente por las comunidades autónomas, con un 45%; seguidas del sector público estatal con un 36,35% y de los entes locales con un 18,73%, según CNC. A nivel geográfico, Navarra, Andalucía y Madrid concentran cerca de la mitad (45%) de todos los encargos autonómicos.
La patronal asegura que este "alarmante" abuso queda reflejado en el "elevado grado de concentración de los encargos en unos pocos medios propios". En concreto, diez entidades instrumentales al servicio de la Administración concentraron en 2023 casi el 65% de los encargos formalizados ese año, durante el que sólo dos empresas públicas estatales, Tragsa y la de ingeniería Ineco, coparon más del 38% de los encargos formalizados.
El informe de CNC denuncia que el, a su juicio, abuso de medios propios no solo provoca pérdida de eficiencia respecto a los fondos públicos empleados, sino que también provoca la reducción del mercado por la posible expulsión de empresas licitadoras y el fortalecimiento de la posición competitiva y dominante de ciertas entidades. "El abuso de los encargos, más allá de la renuncia a los principios de concurrencia y competencia, redunda negativamente sobre el ciudadano al afectar a contratos que podrían ejecutarse por empresas con mayor eficacia, solvencia y capacidad", según CNC.
Según el informe, en 2023 la media de licitadores que compitieron para ganar los contratos públicos adjudicados fue de 2,99, una cifra que dista mucho de la media de 4,09 registrada en el año 2019. En última instancia, la construcción asegura que la caída de licitadores agrava el aumento de las licitaciones desiertas, que han oscilado entre el 8% y el 10% sobre el total durante los últimos tres años.
También han aumentado las licitaciones en que concurre un único licitador, que en 2023 representaron el 44,17% de todos los contratos adjudicados en licitaciones públicas, en claro contraste con las cifras registradas en años anteriores. Si en 2019 el porcentaje de licitaciones únicas ascendía al 34,33%, en apenas cuatro años se ha disparado en 10 puntos. Como ha explicado Fernández Alén, este tipo de contratos son objeto de especial atención por parte de la Comisión Europea porque pueden esconder detrás irregularidades en forma de concertación.
La contratación, enferma
La patronal ha afirmado que no son sólo ellos como parte interesada los que están denunciando la irregular situación del uso de medios propios en España. También lo han hecho en los últimos meses, según han recordado, el Tribunal de Cuentas español y su homólogo europeo, la Comisión Mixta de las Cortes Generales para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
El Tribunal de Cuentas, como publicó LA RAZÓN, detectó deficiencias e irregularidades en los expedientes analizados de la compañía Tragsa de los años 2021 y 2022. Su homólogo europeo, por su parte, ha detectado que el volumen de adjudicaciones directas de contratos públicos sin licitación previa es comparativamente más elevado en España que en el resto de la UE, el 18,2% frente a la media del 15,8% de media. Y Competencia, tal y como publicó también este diario, ha pedido en su análisis del proyecto de Real decreto que desarrolla el régimen jurídico del Grupo Tragsa reforzar la motivación de los encargos a la compañía para garantizar la competencia y evitar el uso sistemático de encargos en casos de urgencia o ante el fracaso de licitaciones tal y como pretende la compañía para acaparar más obra.
Para CNC, los encargos a medios propios deben estar muy bien motivados. También solicitan que la Administración se asegure, antes de formalizar el encargo, de dejar constancia de que las actuaciones se enmarcan dentro del objeto social del medio propio y que éste tenga los medios humanos y materiales para ejecutarlo.
CNC ha asegurado que su denuncia de la situación no la motiva la existencia de medios propios, que en su opinión deben existir para encargarse de los proyectos para los que están dotados y en las situaciones que recoge la ley; sino el uso de los mismos de forma "espúrea", según ha dicho Fernández Alén. "La culpa -ha explicado- es de quien encarga de forma indebida al medio propio". Tragsa, ha añadido, no tiene la culpa, porque además no puede rechazar por ley los encargos. Es de quien la contrata para ejecutar proyectos que no están en su objeto social para "reducir plazos, eludir controles y quitarse problemas".