La comparsa granadina de Fran Rodríguez 'Bendita tú eres' pisó las tablas del Gran Teatro Falla con una propuesta poco arriesgada y algo vista representando a los espíritus de Andalucía. Arrancó con temple nombrando a cada una de las provincias, cayendo en los tópicos de la región. «Andalucía, la cuenta chistes que por su acento llaman cateta», cantan en la presentación. «Soy la fe de Sevilla, y la luna en Granada, el levante que queda enredado en el pelo de una gaditana... Un fandango en Doñana, el mar verde de Jaén»... Son unos espíritus que le rezan a la madre Andalucía , en una defensa del andalucismo con Blas Infante incluso en el forillo que recrea a una Catedral. El repertorio viene cargado de tópicos con el primer pasodoble en defensa del Carnaval acordándose del comandante Juan Carlos Aragón y el segundo con crítica a los gobernantes andaluces que abandonaron a su madre. El popurrí refuerza más aún la idea de representar a una Andalucía cantando todas sus bondades y también sus miedos y sus prejuicios . En una de las cuartetas se centran en la idea de la crítica a la región por el tópico de que los andaluces son unos vagos o estamos siempre de fiesta y cómo no, alguna que otra referencia a la siesta. «¡Siesta! O estamos siempre de fiesta, así nos ven, así nos quieren ver . Resulta tan chabacano el intento de alguna gente, de menospreciar a mi tierra por ser tan bella como durmiente, esos que nos llaman vagos olvida que al sonar sus alarmas Andalucía ya está labrada». «Y tras la comida, mi pueblo un ratito sueña con que a sus hijos y a sus nietos nos le falte un plato en la mesa, que la faena por más dura dignifica, pero tú con tus manos llenas de agravios no sabes lo que significa. Y ahora mismo yo te explico la siesta de Andalucía» . A partir de ahí, lo que la comparsa estima que puede ser la siesta andaluza: «Cuando otros pueblos la necesitaron con su faro apuntando al mar rescatando al subsahariano, con las playas listas y una sonrisa a los madrileños, para todo aquél que la sal y el mar solo ha visto en sueños...». «En la cima de la cultura, reflejada en tu habla si de tu fiesta fue la cuna, trabajando de sol a sol y con sus dos manos sangrando si estás de fiesta es porque la pena se lleva mejor cantando».
