Pudo ganar, pudo perder y al final empató. Un tópico que se hizo realidad en el derbi del Bernabéu para el Atlético de Madrid , un punto que le mantiene a la misma distancia del líder. El Barcelona, el mejor equipo para Simeone como quiso repetir este sábado, puede aprovecharlo para quedarse a un punto de los rojiblancos y a dos de los blancos. «Si gana el Barça en Sevilla estará la tabla bastante apretada para que los periodistas lo disfruten», esgrimió con una sonrisa últimamente más habitual en sus comparecencias. El argentino se mostró satisfecho por el primer tiempo de los suyos, en el que solo faltó «claridad para haber resuelto mejor situaciones importantes». En la segunda parte se vivió «un partido diferente», con un Madrid más intenso después del empate, y los cambios les dieron «la posibilidad de competir» al recuperar la estructura defensiva. «Se terminó quedando en un empate donde seguramente los dos pensemos que nos podíamos haber llevado algo más », sentenció. Preguntado por la jugada del penalti , Simeone se refirió a la acción, a sus ojos similar al tratarse también de un pisotón, señalada unas horas antes en San Mamés a favor del Athletic. Respecto a la actuación de Soto Grado, el argentino sostuvo que « el árbitro ayudó de la mejor manera » y realizó un partido «correcto», aunque sembró la duda sobre la roja que podría haber visto Ceballos por una entrada sobre Barrios. Por su parte, Julián Álvarez , encargado de convertir el polémico penalti, coincidió en el análisis con su entrenador. «Hicimos un gran partido. Sabíamos que se podía dar de esta forma. Hubo situaciones para los dos lados y salió empate», a lo que añadió que hasta el tanto de Mbappé que igualó la contienda estaban «aguantando bien». «No te voy a decir que no estaba un poco nervioso, pero estaba convencido, lo tenía claro y sirvió para un gran gol para el equipo», explicó sobre su impecable definición desde los once metros. «Estamos ahí en la lucha y vamos a seguir hasta el final», concluyó.
